El Cisne dice adiós al ascenso a Asobal ante un Burgos que no dio tregua (32-20)

Nieves D. Amil
nieves d. amil PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

RAMON LEIRO

El equipo de Jabato fue a remolque de los favoritos durante todo el partido

25 may 2024 . Actualizado a las 22:32 h.

El Burgos salió como una apisonadora en un terreno abonado con decenas de aficionados que convirtieron la primera semifinal del play off al ascenso en un campo de minas para el conjunto blanco. No hubo tregua durante los sesenta minutos. No lograron voltear un marcador que iniciaron Jaime González y Guilherme Linhares para que Álex Chan cogiese la batuta y sumase cuatro goles antes de que se hubiese llegado al minuto diez. El partido se les ponía cuesta arriba a los de Jabato ante un Burgos que jugaba a los extremos para hacer circular el balón ante una defensa muy cerrada. La expulsión de Iván Calvo en el arranque de partido por un supuesto golpe en la cara dejaba más que cojo al Cisne, que perdía a uno de sus hombres importantes en la línea defensiva. Ese primer contratiempo y viendo que el marcador se iba a una diferencia de cinco goles, Jabato pide el primer tiempo muerto para intentar reconducir la situación. Da aire al equipo con Gualther Furtado y Víctor Fernández, mientras Roi Sánchez aprovechó para oxigenar los extremos.

Las fisuras en la línea defensiva y los errores en ataque agravaron la situación de los visitantes, que se encontraron en Lloria el principal escollo para voltear el marcador. Pese a que tenían todo en contra, fueron poco a poco equilibrando el resultado y un gol de jugador caboverdiano reduce la diferencia a tan solo dos goles a menos de tres minutos para el descanso. Pero en el momento de mayor esperanza para los blancos, Álex Chan volvió a cargar contra ellos dejando el 14-11 al descanso. El excisneista fue una de las bestias negras para sus antiguos compañeros.

Lejos de mejorar la situación a la vuelta de vestuarios, los de Jabato seguían negados en ataque y Lloria se convirtió en una muralla infranqueable. Mucho más de lo que ya lo era. Algunos lanzamientos de Furtado lograron sostener a un Cisne que se alejaba de las opciones de ascenso, pese a llegar a recortar hasta los cuatro goles la diferencia entre ambos. Poco había en la pista del San Pablo de ese equipo peleón de la segunda vuelta. Jabato optó por una defensa con Mateo Arias adelantado que generó algo de incordio a la primera línea, pero el técnico local detuvo el cronómetro y sus hombres recuperaron el timón del partido.

Quedaban diez minutos y la diferencia era de diez goles. Insalvable. El Cisne ya estaba fuera del partido y de la final que da opciones a meterse en Asobal.