Rutas antiguas y adaptaciones modernas se promocionan al amparo del tirón del Camino Portugués
26 ago 2024 . Actualizado a las 13:02 h.Una larga serie de itinerarios invitan al peregrinaje a Santiago en la provincia de Pontevedra, más allá de los caminos Portugués y de la Costa, que atraen al grueso de las personas que se dirigen a Compostela desde el sur de Galicia. En la provincia de Pontevedra, y siempre basándose en un trasfondo principalmente religioso, aparece también una propuesta para la que Santiago, y su catedral, es una mera etapa hacia un objetivo final. Es la Vía Mariana que desde el nordeste luso lleva al viajero hasta Muxía, el gran santuario de la virgen cerca del fin del mundo gallego.
Cinco rutas de peregrinación a Compostela tienen la patente oficial, un reconocimiento justificado tanto por la Xunta como por el Arzobispado. Son el Camino Portugués, su variante de la Costa, el Camino de Invierno, la Ruta del Mar de Arousa y el Río Ulla y la Vía de la Plata. A la hora dedestacar algunas de esta alternativas, quizás llame más la atención la Ruta del Mar de Arousa y Río Ulla. Por su singularidad, al discurrir por la ría arousana y remontar el Ulla es el itinerario de peregrinación que recuerda más la leyenda medieval. El Camino de Invierno entra por Rodeiro, atraviesa Lalín y Silleda y sale a Vedra, en la provincia coruñesa a través de A Estrada. A estos cinco itinerarios oficiales se espera que se les suma pronto el Camino de la Geira de los Romanos, según explicó el presidente de la Asociación de Amigos del Camino Portugués, el pontevedrés Tino Lores.
A mayores y fuera de la oficialidad del Arzobispado, existe una adaptación moderna que goza de relativa popularidad en O Salnés, concretamente la Variante Espiritual, que sale de Pontevedra y atraviesa la península tomando Armenteira como referencia y acabando en la comarca arousana entroncando con el Portugués tradicional.
Mientras que la Variante Espiritual goza de un numeroso grupo de peregrinos, que ya de paso aprovechan para conocer Combarro sin el engorro de tener que afrontar los atascos y la dificultad para aparcar en verano, en O Salnés hay otro periplo, más desconocido y propuesto por la Mancomunidade. Se trata de la Ruta del Padre Sarmiento, que reproduce el trazado que siguió este religioso a mediados del siglo XVIII y que permite conocer todo el litoral, con Sanxenxo, Portonovo y la península de O Grove como piezas fundamentales del atractivo natural.
En la relación de caminos no reconocidos por la Xunta y la archidiócesis compostelana, pero que tiene sus fervientes defensores, también está el Camino de Ignacio Taverneiro. Esta es una ruta que entra en la provincia por Salvaterra do Miño y avanza por Ponteareas y los municipios rurales y montañosos como Ponte Caldelas y Cerdedo-Cotobade, hasta cruzar Deza-Tabeirós y abocar a la ruta jacobea lusa a Santiago. El nombre de este camino, que impulsan los Concellos que atraviesa, se debe a un peregrino, Ignacio Taverneiro, que murió en 1784 y del que se decía en su acta parroquial de defunción que era vecino de Ponte Caldelas y estaba de regreso después de su peregrinación a la hoy capital gallega.
Tino Lores, presidente de la Asociación de Amigos del Camino Portugués: «Yo recomiendo en julio y agosto evitar los grupos grandes en origen»
Agosto es el mes de mayor afluencia turística a la provincia y también, por consiguiente, de peregrinos en las rutas jacobeas, más en las oficiales que en las otras que se conocen menos. Tino Lores conoce a la perfección todos los itinerarios.
—¿Qué aconseja para hacer el camino de la mejor forma?
—Primero aconsejaría no hacerlo en agosto, porque los albergues están completos y como no se reserven con tiempo no hay sitio. En lo posible evitaría julio y agosto, pero hay gente que no puede hacerlo en otro mes y entonces sí que hay varios consejos.
—¿Cuáles?
—Por ejemplo, evitar los grupos grandes en origen, de más de 30 personas, porque no hay donde dormir. Aconsejo que se intente reservar si se puede.
—¿Qué equipamiento debe tener un peregrino para hacer su ruta sin sobresaltos?
—El mínimo. Una mochila de más de diez kilos ya es mucho. Uno tiene que venir con una camiseta, unas zapatillas y unos calcetines de repuesto por si pasa algo. Y es necesario un saco de dormir, porque en los albergues públicos no hay ropa de cama. Sí que echo en falta en todo el camino lugares de acampada porque, por ejemplo, si estás en el concello de Pontevedra no puedes poner la tienda en ningún sitio y es un problema porque habría muchos jóvenes que acamparían ahí.
—¿Qué recomendaría para evitar las heridas en los pies?
—Un buen calzado. Son fundamentales el calzado y los calcetines. También evitar en la medida de lo posible en las horas más calurosas del día los tramos de carretera porque el calor que desprende el alquitrán destroza los pies. Es bueno llevar también algunas tiritas por si se produce alguna lesión. De todas formas, en el Camino Portugués se tiene la ventaja de que cada 20 kilómetros hay un centro médico.
—¿Calzado abierto o cerrado?
—Depende de cada uno. Yo recomiendo el cerrado, la zapatilla deportiva que es muy cómoda o las botas que son clásicas del Camino.
—¿Cuáles son las mejores horas para caminar en agosto?
—Recomiendo salir pronto, es una buena idea empezar a caminar a las seis de la mañana e ir a tu ritmo. El Camino tiene que hacerse libre de cargas físicas, en la medida de lo posible.