La muerte de su «sobrinito» que hizo que Tomás vaya en moto de una forma distinta

María Hermida
María Hermida PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Tomás, a lomo de su moto de tres ruedas, con la que está recorriendo España.
Tomás, a lomo de su moto de tres ruedas, con la que está recorriendo España. Cedida

Recorre España y vendrá a Pontevedra pilotando con el consumo mínimo, haciendo «ecokilómetros», y concienciando sobre un tipo de cáncer infantil poco común, el neuroblastoma

12 sep 2025 . Actualizado a las 10:15 h.

La familia de Tomás Serra, natural de Castellón, se rompió de dolor hace dos años. «Falleció un sobrinito mío, Mario, con solo ocho años y después de que desde los tres años tuviese diagnosticado un cáncer infantil poco frecuente, un neuroblastoma. Eso nos afectó a fotos, es algo que no puedes entender», explica este hombre. Asimilar así no es algo fácil. Pero, a veces, aparecen válvulas de escape; pequeñas o grandes cosas que se pueden hacer para aliviar esa pena, recordar a la persona y, a la vez, contribuir a que eso a lo que llamamos mundo sea un poco mejor. Y a eso se ha agarrado el tío Tomás. Él, motero y aventurero desde siempre, está haciendo un reto. Anda recorriendo España a lomos de una moto de una forma muy especial, distinta a todas sus carreras anteriores. Porque ahora hace lo que él llama «ecokilómetros», es decir, pilotar con el consumo mínimo para demostrar que esto es posible y que no hace falta gastar tanto combustible. A la vez, se compromete a donar lo que ahorre, todo lo sea capaz de bajar del consumo homologado, para la investigación sobre el neuroblastoma, el cáncer infantil poco común que sufrió su sobrino. Son dos causas en una.

Tomás vivía en Castellón y era operario de fábrica. Hacía zapatos. Pero, él, que con nueve años había formado un grupo de montañismo y convencido a sus padres de que tenían que dejarle ir de fin de semana a escalar con los amigos, tenía claro que, en cuanto pudiese, se echaría al monte. Así que un día hizo el macuto y se plantó en los Pirineos. Allí fue guardia de refugios de montaña. Y, luego, se aventuró a ser empresario. Tiene una casa de turismo rural en el pueblo en el que vive con su mujer; una aldea de solo cinco habitantes. También comanda un proyecto llamado Monte Perdido Extrem, que tiene como epicentro una ruta de senderismo para quienes viven con intensidad la alta montaña.

Todo ello le ocupa buena parte del tiempo. «Los autónomos no tenemos muchas vacaciones», alude. Pero tenía claro que debía sacar diez días de donde fuese para hacer un viaje en moto relacionado con su sobrino. Quiere que se investigue sobre la enfermedad que tuvo: «Él no se salvó, pero otros muchos se van a salvar si se sigue investigando», alega. Así que decidió unir fuerzas con la Fundación Neuroblastoma, a la que va a donar lo que recaude él y lo que logre que donen otros, como ya está sucediendo. 

Las claves de su conducción

¿Cómo es eso de pilotar con bajo consumo? «No es nada difícil. En primer lugar, hay que viajar cumpliendo las normas de circulación. Parece algo lógico, pero la realidad es que cuando tú vas a 80 por hora en una carrera en el que esa es la velocidad máxima te suelen adelantar a un ritmo bastante más rápido. Entonces, no incumplir las normas es lo primero. Y, luego, ir adelantándote a todo. No hay que acelerar hasta llegar al semáforo y luego frenar. Se trata de ir a un ritmo uniforme, sin que el motor sufra. Y está demostrado que se puede pilotar por debajo del consumo homologado», dice.

En su caso, va a dar la vuelta a España en moto a lo largo de diez etapas. Son un total de 5.000 kilometros repartidos en 500 al día. Calcula que con la conducción de bajo consumo no ahorrará más de unos 25 euros. ¿Será esa toda su donación? No. Se trata de contagiar a otros a que hagan lo mismo, a que prueben a pasarse a los «ecokilómetros» y donen lo que ahorren. Además, va reuniéndose con clubes y entidades que también van aportando fondos para esta causa. El sábado recalará en Pontevedra, el único punto del mapa gallego al que arribará en este reto que se ha marcado Tomás Serra.