Vecinos de Marín se movilizan contra un piso okupado: «Es una convivencia imposible»
MARÍN

La presencia de la Policía, tanto Nacional como Local, es recurrente en este edificio
15 mar 2025 . Actualizado a las 11:14 h.Vecinos del edificio Raimundo Vázquez, en la céntrica avenida de Ourense en Marín, se concentraron este viernes para expresar su desesperación por la prolongada okupación de una de las viviendas del inmueble desde el pasado septiembre por unos quince jóvenes. Los manifestantes reclaman agilidad a la Justicia para que se produzca el desahucio de la vivienda que se ha solicitado y también una mayor implicación de las Fuerzas de Seguridad ante lo que consideran que es un grave problema de convivencia. «No podemos vivir tranquilos», señala una vecina de este edificio, haciéndose eco del sentimiento generalizado en la comunidad de propietarios y entre los residentes.

El administrador de la comunidad señala que «se llega a esta situación por la cantidad de conflictos que generan los okupas frente a los vecinos del inmueble». Apunta que en septiembre «recibimos una alarma de algunos vecinos de que en el piso 14 había mucho follón, barullo, entradas y salidas de gente, discusiones, portazos». Entonces el administrador del inmueble se puso en contacto con la propietaria que les explicó que se trataba de «un chico joven», pero a la semana siguiente las quejas continuaban y se volvió a llamar a la dueña de la vivienda. Entonces ella le dijo al administrador que «descubrió que allí había más gente viviendo, que ella había prestado un piso, no alquilado, a un amigo de un familiar o algo así», y al no estar de acuerdo con que hubiese más gente viviendo, estaba intentando que esto acabase.
Problemas de convivencia
Según la explicación del portavoz vecinal, la propietaria de la vivienda «consigue que el chaval se vaya, pero los demás se quedan allí y empieza un efecto llamada que llena la casa de gente», según el administrador del inmueble, que añade que, «a partir de este momento todo son follones, ruidos, peleas entre ellos, discusiones con los vecinos», entre otras cuestiones. Hay también sospechas del presunto consumo de drogas en la vivienda, situación que al parecer los implicados niegan.

Como ejemplo de la falta decomportamiento cívico de los okupas, el portavoz de los vecinos sostiene que supuestamente estos jóvenes «le hacen la vida imposible a una vecina que cuida de una persona con gran minusvalía, porque le aporrean las paredes, le ponen la música a todo volumen de noche, cosas de este tipo».
Nueve meses de conflicto
En la Comisaría y en la Policía Local hay denuncias sobre este asunto, entre otras cuestiones, por racismo por los supuestos insultos contra una de las residentes del inmueble. «Los vecinos, ante todo esto y lo que viven cada uno de ellos, que incluso tienen miedo cuando se encuentran en el ascensor» quieren que se actúe de una vez. Hay una denuncia desde septiembre en el Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número dos de Marín, reclamando el desahucio.
El representante de la comunidad de propietarios incide en la repercusión negativa que tiene para los vecinos lo que está ocurriendo. «Llevamos ya nueve meses desde que empezaron a hacer ruidos, molestar y causar daños al inmueble».
La presencia de la Policía, tanto Nacional como Local, es recurrente en este edificio, como este viernes lo fue durante una concentración que discurrió sin mayores incidentes más allá de algunos insultos. «La situación es muy mala. Es una convivencia imposible», subrayó una de las vecinas del inmueble, que aludió a «ruidos, peleas, orinar por la ventana... La situación es insostenible».