Supera dice que está abierta a negociar para reabrir la piscina de Ponte Muíños

María Hermida
María Hermida PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

RAMÓN LEIRO

La Fundación Rías do Sur, dueña de las instalaciones, también apuesta por el diálogo con la gestora, pero no aceptará pagar la luz de todo el complejo

15 mar 2022 . Actualizado a las 12:27 h.

El cierre de la piscina de Ponte Muíños ha supuesto todo un varapalo en Pontevedra. Se trata de una instalación casi única en Galicia, donde tanto entrenan deportistas de élite como medio millar de personas ligadas a clubes de natación o waterpolo. Amén de numerosos ciudadanos abonados. La decisión de echar el cierre se tomó por parte de la empresa Supera, que gestiona las instalaciones y que dice que no puede asumir los costes energéticos. Además, al igual que hizo en Pontevedra, Supera también echó el candado en otras doce piscinas que tiene en España. Pero, más allá de esta concesionaria, la piscina pontevedresa, de carácter privado, tiene una propietaria: la Fundación Rías do Sur, que desde el primer momento señaló que quiere reabrir la lámina de agua. ¿Será esto posible a corto plazo? No parece fácil. La empresa dice que está abierta «a cualquier planteamiento serio» que le haga la fundación para reabrir. Pero, ojo. La propietaria señala que Supere le pide cosas inasumibles.

La empresa Supera afirma que, aunque en el caso de la piscina de Ponte Muiños es Ence quien paga el calentamiento del agua, no puede asumir los demás costes energéticos. Y que por eso cerró el vaso y el spa y dejó abiertas las instalaciones que no requieren uso de agua. También indicó que, fruto de esta decisión, mandó al ERTE a una docena de trabajadores y que fue informando de todo ello a la Fundación Rías do Sur. Concretamente, señala: «Nosotros estamos abiertos a cualquier planteamiento serio que nos quieran hacer. Les hemos dado opciones que han rechazado. Estaban informados puntualmente. Si ahora entienden que su planteamiento ha cambiado, nosotros nos sentamos con ellos cuando quieran».

La fundación, por boca de su presidente, Héctor Vilariño, aporta una versión distinta. Cree que lo de los costes energéticos es solo una cortina de humo por parte de Supera. Y que detrás de la decisión empresarial de cerrar sus piscinas lo que hay «es una pésima gestión». Vilariño no cree que fuesen puntualmente informados del cierre de la instalación, ni que la concesionaria les diese opciones viables. Está dispuesto al diálogo, pero advierte: «Lo único que nos ofrecieron es que paguemos nosotros todo el gasto energético del complejo deportivo, lo cual no nos parece lógico y, además, no es viable para la fundación. Estamos hablando de entre 25.000 y 30.000 euros al mes, y eso es inasumible. Podríamos negociar hacernos cargo del gasto de la piscina, incluso nos ofrecemos a poner contadores separados, pero no la barbaridad que nos piden».

 Las palabras de Tino Fernández

La Fundación Rías do Sur buscó ayer la complicidad del Concello de Pontevedra ante el problema que tiene encima. Tino Fernández, concejal de Deportes, señaló que el Ayuntamiento está muy preocupado por la situación en la que quedan varios clubes, a los que trata de buscar alternativas. Señaló que la Administración local está dispuesta a colaborar, por ejemplo se planteó que pueda asumir el cambio de halógenos por leds, pero que necesita documentación sobre lo ocurrido para actuar. «Non podemos poñer parches, fai falta unha solución a longo prazo que permita respirar aos clubs», dijo.