Juan Carlos I aterrizó en Lavacolla y llegó a la capital turística de las Rías Baixas a última hora de la tarde
15 may 2024 . Actualizado a las 18:27 h.Poco antes de las ocho de la tarde, el rey emérito volvía de nuevo a pisar suelo gallego. Apenas un mes después de que Juan Carlos I visitase Sanxenxo para arropar a la tripulación del Bribón en la segunda regata de la liga nacional de la clase 6 metros, está de vuelta. En esa ocasión, el monarca no participó en la prueba y ahora queda por saber qué hará este fin de semana en la tercera jornada de la competicón.
Cerca de las ocho y media de este martes, el rey emérito llegaba a la casa de Pedro Campos acompañado por su anfitrión, que como y es habitual fue a recogerlo al aeropuerto. Igual que siempre, se limitó a sonreir y saludar con la mano a los periodistas que esperaban en la carretera que da acceso a la residencia de su amigo en Nanín.
No ha habido sorpresas en este desplazamiento y Juan Carlos I aterrizó en Lavacolla procedente de Vitoria, donde suele someterse a algún reconocimiento médico cuando visita España. El cierre por obras de Peinador cambió su ruta habitual en sus viajes a las Rías Baixas.
En esta ocasión, su llegada a Galicia casi coincide con la visita que la reina Sofía hizo el pasado lunes a Lugo, adonde viajó para conocer el funcionamiento del Banco de Alimentos de la ciudad. Juan Carlos I, sin embargo, está previsto que permanezca en Sanxenxo hasta el próximo domingo, pero sigue siendo una incógnita sus planes en las Rías Baixas. Cada vez son más escasas sus salidas, pero se sigue manteniendo fiel a sus visitas la Náutico de Sanxenxo y a las salidas a cenar con algún miembro de su familia. El pasado mes de marzo acudió junto a la infanta Elena al restaurante Ribadomar, de Cambados, y pidió un salpicón de lumbrigante y las recomendaciones del cocinero y dueño que se mostró encantado de tenerlo en su local. Pero también se le ha visto en Culler de Pau, restaurante con dos estrellas Michelin de Javier Olleros en O Grove, donde estuvo acompañado de su hermana, la infanta Margarita; el marido de esta, Carlos Zurita; y su hija María Zurita.
Su entorno más cercano ha insistido en que cada vez sus visitas serán más frecuentes hasta que se normalice la presencia del rey emérito en Sanxenxo. La frecuencia de este 2024 recuerda a la rutina que tenía antes de que se trasladase a Abu Dabi. En cada estancia guarda un perfil bajo después de que su primera visita a España tras mudarse a la capital de las Rías Baixas generase mucha polémica por su actitud y su controvertida respuesta «Explicaciones, ¿de qué?», al preguntarle si daría los motivos que le llevaron a trasladarse a Abu Dabi.