Datos, imágenes y voz: así agiliza la tecnología los diagnósticos médicos

Olga Suárez Chamorro
O. Suárez REDACCIÓN

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Imágenes de paneles de biomarcadores de la empresa Quibim
Imágenes de paneles de biomarcadores de la empresa Quibim

La inteligencia artificial irrumpe en el sector sanitario para mejorar los tiempos y la precisión de los tratamientos

21 abr 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Uno de los entornos en los que se almacena más información a lo largo de la vida de una persona es en el sanitario y todos esos datos pueden ser de gran ayuda a la hora de establecer un diagnóstico médico gracias a la tecnología. La inteligencia artificial médica se basa en algoritmos que analizan una gran cantidad de información para establecer patrones de comportamiento y poder detectar patologías. Su objetivo es ayudar a los profesionales sanitarios a diagnosticar con mayor precisión y rapidez, y lo hacen gracias a algoritmos de aprendizaje profundo (más conocidos por su término en inglés, deep learning): «Este aprendizaje profundo permite al ordenador entender cómo funciona el mundo real y tomar decisiones informadas en respuesta a las situaciones que se le presentan, detectando patrones invisibles a nuestros ojos humanos», explican desde Invox Medical.Y, aunque no son herramientas perfectas y necesitan de la supervisión humana, se ha demostrado que su utilización proporciona a los facultativos las herramientas para diagnosticar enfermedades con mayor eficiencia y precisión. 

Una de las soluciones más interesantes se encarga de la transformación de imágenes en predicciones procesables, un desarrollo en el que se ha especializado la empresa tecnológica Quibim, y que tiene la capacidad de completar de manera automática los informes radiológicos y extraer conclusiones. «Al analizar grandes cantidades de datos de pacientes, la inteligencia artificial puede identificar patrones que, de otro modo, pasarían desapercibidos y facilita a los médicos una perspectiva más amplia sobre una enfermedad o condición en particular», señala Ángel Alberich-Bayarri, CEO de la firma. A través de sus paneles de biomarcadores de imágenes, analizan los mecanismos de enfermedades como el cáncer, mejoran los programas de medicamentos y monitorean la eficacia del tratamiento: «Todo ello lo hace a través de un enfoque de análisis del cuerpo completo para cada paciente, impulsando la medicina de precisión agnóstica de tejidos, es decir independientemente del tipo de cáncer o en qué parte del cuerpo se originó», explica. Y pone de ejemplo sus soluciones específicas para detectar tumores en la próstata o en el cerebro, que comparan nuevas imágenes con otras similares de una base de datos propia con diagnósticos ya establecidos.

Redacción de informes médicos

Otras soluciones están destinadas a reducir el tiempo dedicado a labores más burocráticas, que se pueden utilizar en diferentes sectores. Invox Medical incorpora inteligencia artificial para el reconocimiento de voz y está creada específicamente para los sanitarios, pues cuenta con un diccionario específico para cada especialidad. Además, permite introducir datos de manera rápida y con una tasa de acierto próxima al cien por cien, gracias a que el sistema es capaz de entrenarse de manera automática para comprender cada vez mejor la fonética y la terminología usada por cada médico. 

Existen también sistemas de monitorización remota que recopilan información sobre el estado de salud de los pacientes, como pueden ser sus constantes vitales, ritmo cardíaco o tensión arterial; y la combinan con patrones de comportamiento, como el tiempo que pasan dormidos o los movimientos que realizan: además de ayudar al profesional en el diagnóstico, estos datos son muy útiles para facilitar la comunicación al paciente sobre su estado de salud. Existen diferentes empresas que ya ofrecen este tipo de sistemas, algunos de ámbito más general y otros centrados en patologías específicas. 

Por último, las bases de datos personales generadas en un entorno médico también pueden ser útiles a la hora de identificar candidatos para estudios clínicos o pacientes con más probabilidades de responder a un fármaco, monitorizando la toxicidad y los eventos adversos a través de modelos de IA; este es el objetivo de otra de las soluciones tecnológicas desarrolladas por Quibim. Este aspecto está además vinculado al desarrollo de fármacos, pues los laboratorios están cada vez más digitalizados para mejorar el diseño de los medicamentos y encontrar la combinación de sustancias más adecuada con la ayuda de la tecnología.