Cuidado con el wifi en vacaciones: «Con un ordenador se puede emular una red pública y ver todos los datos de nuestro móvil»
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No consultar información sensible en redes públicas, usar una VPN y configurar el smartphone para que no se pueda poner el modo avión sin conocer el PIN son algunos de los consejos para las vacaciones
25 ago 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Aunque el verano ya está avanzado, todavía hay gente viajando. Algunas personas regresan a casa para incorporarse a la rutina y otras empiezan ahora sus vacaciones. En cualquier caso, es importante tener en cuenta la importancia de la ciberseguridad también durante estos días de descanso, especialmente en lo que a uso de redes públicas se refiere.
Lo explica Jordi Serra, profesor de los Estudios de Informática, Multimedia y Telecomunicación e investigador del grupo K-riptography and Information Security for Open Networks (KISON) del Internet Intedisciplinary Institute (IN3) de la UOC. «En general no somos conscientes y usamos la configuración del teléfono por defecto». La concienciación sobre protegerse de la ciberdelincuencia suele llegar tras sufrirla en primera persona o a través de una persona cerca.
Un ejemplo. Cualquier dispositivo, en general, intentará conectarse de nuevo a una red wifi que ya conoce. Si no se le dice al smartphone o al portátil que olvide la conexión a la red de un restaurante, de un hotel o del aeropuerto, hay una puerta abierta para los ciberdelincuentes, que con solo un odenador pueden montar un sistema de red que emule dichas redes. «Todo el tráfico de internet a partirde ese momento va a pasar a través de ese ordenador».
Eso significa que la persona que ha creado esa red para emular a la pública tendrá acceso a toda esa información. Por eso, porque la capacidad de que los ciberdelincuentes puedan acceder a la información de un dispositivo a través de la red wifi, Jordi Serra recomienda que, en el caso de conectarse a alguna de estas redes, se evite navegar donde se almacena información sensible. Es decir, lo mejor es no operar con la aplicación del banco conectado a este tipo de redes, consultar información sanitaria u operar con la tarjeta de crédito. «Eso en casa, nunca en una red pública», recalca el experto.
No existe, además, una configuración por defecto que le diga al teléfono que olvide automáticamente todas las redes a las que se conecta, sino que hay que hacerlo de manera manual. «Lo mejor es decirle al teléfono que olvide esa red o usar una red VPN», ya que todo el tráfico estará cifrado, con lo que es imposible que se puedan ver los datos de la navegación de ese dispositivo.
«Si tienes la necesidad de navegar en una red pública, la recomendación es usar una VPN». Existen herramientas gratuitas, pero el profesor de la UOC recuerda que todo lo que es gratis lo es porque detrás hay un negocio con los datos. «Si me voy a ir de viaje, lo mejor es contratar en el pack una VPN por si me tengo que conectar en algún momento», recomienda.
¿Ocurre lo mismo con la conexión bluetooth? «En el caso del bluetooh es un tema de privacidad». El bluetooth es un identificador único en el mundo, con lo que es posible utilizarlo para hacer un rastreo. Es el sistema que se utiliza para calcular tiempos de desplazamiento cuando por ejemplo se hace un viaje por autopista.
En el caso de la conexión a dispositivos ya no existe demasiado problema, ya que normalmente para emparejar a través de bluethoot se requiere un código que se genera aleatoriamente en ese momento. Y hay que aceptar que una persona envíe información a tu móvil en el caso de sistemas como AirDrop. «En las últimas actualizaciones siempre está cerrado o abierto solo para contactos, por lo que hay que abrirlo expresamente y además se desbloquea durante un tiempo corto».
Igual ocurre con el NFC, que se utiliza para hacer pagos. Antiguamente estaba siempre abierto, con lo que cualquier persona podía acercar un lector y hacer un cobro. «Ahora hay que identificarse y para poder pagar hay que desbloquear el teléfono».
La tecnología ha evolucionado y los problemas se pueden dar en dispositivos muy antiguos, lo cual es poco habitual en España. Pero sí hay otras zonas del planeta en la que se está operando con terminales con tecnologías de hace años.
Y más allá del uso de las tecnologías que se hace durante las vacaciones, Jordi Serra también pone sobre la mesa una serie de consejos sobre el uso de las redes sociales a la hora de salir de viaje. El más sencillo es evitar publicar que se está fuera de casa o dar información sobre dónde está nuestro domicilio. «Es relativamente sencillo en contrar si hacemos una foto desde el balcón del salón o desde la terraza. No somos conscientes, pero en internet tenemos una red de contactos a través de las redes sociales que hace relativamente fácil encontrar donde vivimos».
Si a eso se le añaden publicaciones en tiempo real sobre el viaje o diciendo que estamos de vacaciones «estamos diciendo que en casa no hay nadie», alerta el profesor de la UOC. Su recomendación es esperar a regresar para publicar o asegurarse de que no se pueda identificar el domicilio que se queda vacío.
Serra también recuerda que hacer fotografías con geolocalización es una práctica habitual que permite luego tener las imágenes ordenadas con facilidad, pero para subirlas a redes sociales o incluso compartirlas con otras personas es mejor eliminar esa información de los metadatos.
Cómo proteger los dispositivos
Personalizar la configuración es básico para añadir una capa de seguridad a los dispositivos. «Al final, en los dispositivos tenemos toda nuestra vida», desde datos bancarios a de salud, contactos, notas... El primer consejo que ofrece Serra es asegurarse de si una tercera persona puede desbloquear el teléfono, si es capaz de abrirlo o simplemente puede poner el modo avión.
«Es fundamental que una tercera persona, sin saber la contraseña pueda ponrelo en modo avión», ya que eso impide que se pueda usar la localización en caso de robo o de pérdida. Existen modelos en los que la pestaña de control permite hacer esta operación sin saber la contraseña.
También es importante bloquear el enchufe de USB si no está bloqueado. No el de carga, sino los cables de datos, ya que de este modo si alguien sustrae el teléfono podría desprotegerlo a través de software de tercero, ya que aunque se enchufe el cable, no va a poder leer nada.
También es interesante tener protegida la SIM, ya que si alguien se lleva el teléfono puede realizar llamadas. Es también algo que antiguamente era más problemático, porque no existían las tarifas planas, pero es posible que se realicen llamadas al extranjero o a números de teléfono especiales que supongan un coste importante.
«Si no lo tenemos configurado así, después del robo es importante llamar lo antes posible a la operadora para bloquear esa línea y que no puedan hacer llamadas», destaca el profesor de la UOC, aunque esto no evitará que ya hayan podido acceder a nuestros datos, por lo que el acceso remoto para bloquear el dispositivo, localizarlo e incluso borrar a distancia su contenido será esencial. Todos los iPhones y Android modernos incluyen estas opciones, que debemos configurar antes de salir de viaje. «Hay que bloquear todo el uso del teléfono si no está desbloqueado por el PIN o por biometría: que no se pueda acceder al centro de control para ponerlo en "modo avión", desconectar la localización, etc.», explica.