
El uso de metálico continúa cayendo mientras se consolida la huella dactilar y el rostro para realizar compras
15 ago 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Ni el apagón sufrido el pasado 28 de abril ha logrado cambiar las tendencias: los españoles ya no quieren utilizar dinero en efectivo. Las tarjetas, el teléfono móvil, e incluso los relojes inteligentes, se han convertido en la vía predilecta de los consumidores para pagar sus compras. Así lo confirma la encuesta Métodos de pago: La decisión definitiva, elaborada por la firma tecnológica PaynoPain, que confirma que solo el 23 % de los ciudadanos españoles se decantan por el dinero en metálico: los métodos de pago electrónicos ya lideran la batalla mientras crecen aquellos que utilizan parámetros biométricos, como la huella dactilar o el reconocimiento facial.
La realidad, obviamente, varía según la generación. Entre el público de los 18 a los 28 años predomina el uso de monederos digitales, wallets, que utilizan cerca del 50 %. En segundo lugar está la tarjeta, por la que optan el 35 %, mientras que el resto continúa con los billetes y monedas. En el caso de los Baby Boomers, ahora entre los 57 y los 76 años, el 51 % se decantan por la tarjeta, con el efectivo en segunda posición, con el 41 %, y los wallets rozando un escaso 4 %.
Aunque el avance digital es claro, son pocos los que contemplan la posibilidad de que desaparezca totalmente el dinero en efectivo. El 87 % de los encuestados así lo aseveran, mientras que el 79 % de todos ellos considera que estará aún presente en el corto y medio plazo, al menos en los próximos 10 años. En cuanto a la cantidad de dinero en metálico que llevan los españoles en sus carteras, los datos destacan que el 46 % todavía posee cash, pero nunca más de 20 euros. Cerca de un 39 % dice que en su caso es bastante más, mientras que un 15 % rechaza de raíz esta vía de pago y opta por la tarjeta, el móvil, el reloj inteligente o el bizum.
Futuro y presente
¿Si el pago electrónico ya ha desplazado al efectivo, qué tiene previsto el sector para el futuro? Según el estudio La digitalización y democratización de los pagos del consumidor, elaborado por Nuek y Analistas Financieros Internacionales (AFI), el mundo se dirige hacia una identidad digital única para pagar, identificarse y realizar operaciones financieras. Tal y como indican, un 60 % de los consumidores europeos estaría dispuesto a utilizar esa credencial informática.
Esa tendencia se asocia además con el impulso de la billetera digital europea (EUDI Wallet), que busca consolidar la identidad digital única y segura en todo el Viejo Continente. Eso sí, los encuestados afirman que para llevarlo a cabo resulta fundamental una regulación clara y efectiva que permita su despliegue. Antes, lo que se está consolidando es el uso de la biometría como estándar de autenticación. Un 63 % de los usuarios europeos afirman que utilizan su huella o su rostro para autorizar pagos, gestos que cada vez se ven más en comercios. Mientras, las autoridades siguen insistiendo en que nunca está de más llevar 20 euros en el bolsillo: ¿quién puede asegurar que España no volverá a quedarse a oscuras?