El conjunto santiagués no opuso resistencia en ningún momento y maquilló el resultado en el último cuarto
06 abr 2010 . Actualizado a las 13:03 h.No hubo historia. Los gallegos no aparecieron por Bilbao y, además, los hombres de negro no les permitieron levantar la cabeza en ningún momento, hasta terminar el partido poniendo la mayor diferencia de su historia en la ACB (98-58).
Fue tarde de marcas para los bilbaínos, ya que a la victoria y a su mejor renta conocida le sumaron ayer un triunfo más, con el que encadenan ocho seguidos. Llegó con premio, ya que le aupó al octavo puesto de la claisficación. ?Por contra, el Obradoiro vio muy limitadas sus posibilidades de mantener la categoría en una jornada catastrófica para ellos, ya que a su derrota y la forma de padecerla también se le sumó el triunfo del Lagun Aro el domingo.
Arranque esclarecedor
Y es que el choque de ayer lo tenían ganado los locales hasta antes de comenzar. Pronto se vio que los gallegos no tenían la actitud necesaria para hacer frente a la cadencia local y un par de canastas fáciles de Banic y Mumbrú con tiros de media distancia imprimieron la confianza que en otros partidos no habían tenido. Encima, la consigna era clara: ante la menor rotación de los visitantes -machacados por las bajas- sólo había una cosa clara, correr.
Así, un par de contraataques hacían pedir a Curro Segura su primer tiempo muerto (13-4) para intentar parar la sangría. Pero no era el día para medias tintas.?El Bizkaia Bilbao Basket, si una cosa tuvo clara desde el primer momento es que no iba a confiarse ni un instante ni a bajar el ritmo. Sólo un par de florituras en los dos minutos finales del primer cuarto dejaron el partido aún abierto aunque sin mucho que decir (23-10).
Los de Katsikaris necesitaban vencer de más de 27 puntos para alcanzar el octavo puesto y la entrada del torbellino Seibutis pronto dejó claro que podía ocurrir. Un robo maquinado entre Blums, que le metió la mano a Alfonso Sánchez mientras se disponía a subir la bola, entre Markota, que se lanzó al suelo a por ella, y el escolta lituano, que metió la canasta con falta del base -y posterior técnica- dinamintó definitivamente el choque (34-14).
Los visitantes ya no sabían por dónde echarle mano al partido porque, además de que les estaban haciendo un roto en ataque, no encontraban posiciones claras para anotar. Pero se vio en todo momento que adoleció el Obradoiro de actitud. Sólo hace falta mirar las faltas cometidas por los gallegos (13) para saber que ni supieron, ni quisieron parar en ningún momento a los bilbaínos.
Así que con el partido roto, Katsikaris se dedicó a reservar fuerzas y a lograr que hombres con menos confianza la fueran recuperando. Fue el caso claro de Markota, pero también Seibutis dio un paso adelante y Blums se gustó en su posición eventual de base ante la baja de Javi Rodríguez por una microrrutura fibrilar. Sin duda, los que se acercaron ayer al Bizkaia Arena disfrutaron de lo lindo con el juego desplegado por su equipo, que siguió tirando para adelante hasta marcar la mayor diferencia de su historia. En cambio, el Obradoiro buscará su batalla particular el domingo ante el Alicante para seguir en ACB.
Ficha técnica:
98 - Bizkaia Bilbao Basket (23+29+27+19): Salgado (7), Warren (6), Mumbrú (11), Hervelle (9) y Banic (10) -cinco inicial-; Blums (20), Seibutis (14), Vázquez (-), Markota (13) y Moiso (8).
Entrenador: Fotis Katsikaris.
58 - Xacobeo Blu:sens (10+13+10+25): Alfonso Sánchez (7), Bailey (10), Bulfoni (5), Terry (11) y Pasalic (7) -cinco inicial-; Aguilar (-), Alberto Ruiz (4), Massey (12), Manzano (-) y Higgins (2).
Entrenador: Curro Segura (ESP).
Parciales: 23-10, 52-23 (descanso); 79-33 y 98-58 (final).
Árbitros: Pérez Pérez, Muñoz y Bultó. Sin eliminados.
Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo octava jornada de la Liga ACB, disputado ante unos 8.124 espectadores en el Bizkaia Arena.