La Sareb no espera más y pide licencia para la finca del Peleteiro

r. martínez SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

cedida

Descartada la revisión de usos pretendida, prevalecerá la implantación comercial

30 may 2023 . Actualizado a las 20:12 h.

La propiedad del solar del Peleteiro en el Ensanche, un fondo de inversión americano participado por la Sareb (el banco malo), no ha esperado ni a que se constituya la nueva corporación para ejercer sus derechos urbanísticos sobre la céntrica finca. La Sareb ha dejado claro que no está dispuesta a dilatar más una solución para el desarrollo de la parcela que en su tiempo ocupó el colegio Manuel Peleteiro y ha solicitado ya licencia para edificar la zona a través de Árqura Homes, su promotora de viviendas.

La iniciativa llegó justo con el cierre de la campaña electoral, en la que el interés por el futuro de esa pieza estratégica del Ensanche se reavivó precisamente por la propuesta de la que está llamada a ser la nueva alcaldesa, Goretti Sanmartín (BNG), para que la Sareb la ceda para usos públicos y para la construcción de vivienda protegida en régimen de alquiler, en el marco de las medidas anunciadas por el Gobierno central para la movilización de activos del banco malo para destinarlos a vivienda pública.

La Sareb tomó la iniciativa el viernes por la noche, justo con el cierre de la campaña electoral, aunque, tras el fin de semana, la petición se registró ayer.

El Ayuntamiento tendrá que verificar ahora si el proyecto presentado por la propiedad cumple los requisitos y, si es así, darle trámite, aunque será con las condiciones que recoge el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), en el que prevalece el uso comercial aprobado hace años. No es esa la opción que quieren las formaciones municipales ni el comercio de la zona, pero, en ausencia de un acuerdo para modificar esos usos —después de que fracasasen tanto las iniciativas del gobierno de Martiño Noriega como del de Sánchez Bugallo—, esa es la distribución que fija el planeamiento. Aunque la propiedad estuvo dispuesta a revisar los usos tanto en el mandato anterior como en el que acaba ahora, las diferencias en ambas etapas en el seno de la corporación no lo hicieron posible, pese a coincidir todos los partidos en que aquella ordenación quedó superada por las necesidades actuales de la zona.

La propiedad ya advirtió en más de una ocasión en la comisión municipal creada para abordar el futuro de la parcela que sin un acuerdo municipal solicitaría licencia para desarrollar el solar con las condiciones actuales del planeamiento. «Nós xa avisamos en numerosas ocasións que iso era posible», afirmaba ayer Mercedes Rosón, concejala de Urbanismo y número dos de la candidatura de Sánchez Bugallo, quien durante la campaña cuestionó la iniciativa del BNG para reclamar la cesión del solar.

Rosón afirma que el actual escenario «pon de manifesto a gran torpeza e desleixo da oposición toda ao rexeitar unha proposta que viabilizaba consensuadamente o mellor para esa parcela e para o Ensanche», dice sobre la propuesta que los socialistas pusieron sobre la mesa y que la oposición rechazó en diciembre. «Xa advertín que era un tema que me preocupaba», porque la propiedad no solo tiene «un dereito recoñecible, senón esixible», apuntaba también ayer el alcalde en funciones, Xosé Sánchez Bugallo, quien plantea «a ver cal é a solución agora».

La propuesta que no fraguó rebajaba la edificabilidad y daba predominio al uso residencial

El planeamiento actual otorga una edificabilidad de 23.500 metros cuadrados a la parcela del Peleteiro, de los que algo más de la mitad (12.000) son para uso comercial. El resto es para ocupación residencial (4.500 metros cuadrados, unas 45 viviendas), hotelero (6.100 metros cuadrados) y un centro sociocultural de 900 metros cuadrados que tiene que ceder la propiedad de la finca junto con la plaza pública de prácticamente 1.400 metros cuadrados de superficie.

Pero no es eso lo que quiere el Ayuntamiento, que ya en el mandato anterior negoció una revisión de usos con la propiedad que daría prevalencia al carácter residencial de esa pieza, frente al comercial, y que además rebajaba la edificabilidad total en 3.600 metros cuadrados. Eso la dejaría en 19.900, de los que 15.500 serían residenciales (para encajar unas 150 viviendas) y 3.500 para uso comercial. El hotelero desaparecería. Los 900 para el centro sociocultural se mantienen en cualquier caso (como la plaza), pero con la propuesta socialista ese espacio se repartiría con un centro de día. También habrá aparcamiento.

Las diferencias en la corporación no estaban en ese reparto. De hecho, es exactamente el que negoció CA en su día, y que Bugallo mantuvo. La cuestión está en la ejecución del proyecto urbanizador. CA no logró sacar el suyo (precisaba una mayoría absoluta que no tenía), lo que achacó esencialmente a intereses electorales del PSOE (el debate plenario se dio a escasos meses de las elecciones del 2019). El de Bugallo tampoco superó el corte. CA, con la que aproximó posturas sobre su diseño, no le dio finalmente su respaldo al no convencer a todos los vecinos. El PP defendía otra vía.