La parroquia de Cesar, en Santiago, rinde homenaje al que fue su presidente más de 25 años

r. m. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Marcial Prado, en el acto de reconocimiento de sus vecinos, a la izquierda de la alcaldesa, Goretti Sanmartín. También asistió el exalcalde Xerardo Estévez y representantes de todas las formaciones políticas de Raxoi
Marcial Prado, en el acto de reconocimiento de sus vecinos, a la izquierda de la alcaldesa, Goretti Sanmartín. También asistió el exalcalde Xerardo Estévez y representantes de todas las formaciones políticas de Raxoi PACO RODRÍGUEZ

Marcial Prado, que a sus 83 años todavía colaboraba hasta hace poco con la asociación vecinal, dice que hizo por la parroquia «o que había que facer, nin máis nin menos»

21 oct 2023 . Actualizado a las 21:11 h.

Cesar rindió ayer un emotivo homenaje al que fue su primer presidente vecinal y valedor de la parroquia hasta el 2016, cuando dejó el cargo. A sus 83 años, Marcial Prado Rial es todo un histórico del movimiento vecinal que no ha dejado de colaborar con la asociación hasta ahora. Pero, dedicado ya a otros menesteres, el actual presidente, José Antonio Barreiro, considera que era el momento de reconocer su entrega y, a través de él, también la de aquella primera directiva que nació de la fuerza de la unión que siempre tuvo esa parroquia, según relató Eva Muíño, cofundadora de la asociación, en el vídeo con el que se abrió el acto después de que un dúo participado por una nieta del homenajeado interpretase una pieza musical.

La asociación surgió de la unión, pero también de la necesidad de reivindicar el rural y la prestación de servicios, tarea a la que Marcial Prado se entregó con tesón, pero también con un carácter dialogante que ayer le reconoció el exalcalde Xerardo Estévez, invitado y participante en un acto que se celebró en el local social que Cesar consiguió bajo su mandato, aunque parte de los vecinos que se sumaron a ese reconocimiento lo siguieron por megafonía bajo una carpa en el exterior. En la planta baja del centro apenas caben unas 50 personas.

Emocionado, acompañado de su esposa, Victoria Janeiro, y arropado por el cariño desplegado en los discursos de sus nietas y de quienes intervinieron en el acto, incluida —a través de vídeo— Marilar Aleixandre, con quien coincidió, relató ella, «nas loitas do movemento veciñal de Vigo», Prado fue escueto en su intervención, en la que hizo gala de la humildad que le atribuyó la presidenta de Ferusa (Federación de Asociacións de Veciños do Rural), Cruz Vázquez. «O que fixen pola parroquia foi o que había que facer, nin máis nin menos», dijo Prado.

Cruz Vázquez: «Aportou o mellor de si mesmo para acadar un rural respectado»

Con Marcial Prado estuvieron la alcaldesa, Goretti Sanmartín, y representantes de todas las formaciones políticas de Raxoi, entre ellos los portavoces del PP, Borja Verea, y del PSOE, Gonzalo Muíños. Sanmartín no tuvo ocasión de coincidir con él como interlocutor vecinal, aunque sí sabía de él, dijo, por su talante, al igual que, recordó, de Vivencio Freire, de O Castiñeiriño. Pero reconoció el trabajo vecinal afirmando que «é imposible que un Concello marche ben sen participación veciñal».

De su semblanza se encargaron Xerardo Estévez y Cruz Vázquez, presidenta de Ferusa. «Tiña unha forma de dicir as cousas que convencía», dijo Estévez, aunque no siempre había acuerdos. Pero ahí Prado tenía el valor de «saber escoitar», esencial para «transitar cara ao acordo». «Sabe escoitar, e sabe que para escoitar hai que sentar e falar», añadió el exalcalde.

Cruz Vázquez, con quien Marcial Prado compartió la dirección de Ferusa (él en la vicepresidencia), habló de «un home de bo facer», «orgulloso de ser de aldea» y reivindicativo. «Reivindicativo con contundencia, pero prudente; respectuoso, pero sempre presente», dijo de quien «aportou o mellor de si mesmo para acadar un rural respectado» y cuyas aportaciones eran «tidas en conta por veciñanza, políticos e técnicos».