El Obradoiro demuestra que también sabe ganar sin el recurso de los triples

Ignacio Javier Calvo Ríos
NASO CALVO LA VOZ / SANTIAGO

SANTIAGO

PACO RODRÍGUEZ

Derrotó al Zaragoza en Sar con solo un 18 % de acierto y ganó en Tenerife con un 25 % de efectividad

05 dic 2023 . Actualizado a las 17:55 h.

Una de las armas preferidas del Obradoiro es el lanzamiento desde el perímetro. A base de triples ganó infinidad de partidos en sus últimos cursos en la ACB. Grandes tiradores pasaron por la nómina de Sar. Esta temporada, el colectivo de Moncho Fernández destacó en varias ocasiones por su magia desde más allá de la línea del 6,75.

Lejos der ser por el momento un arma letal, el mejor repertorio lo firmaron los compostelanos en la jornada inaugural ante el debutante Palencia, que cayó en la caldeira por 84-64, con un 45 % de acierto desde la distancia (10 de 22 triples), con dos lanzamientos convertidos por Tinkle, el fugado Washington, Scrubb y Jordan.

El triunfo más sonado de lo que va de torneo se produjo en Sar, tras dos prórrogas ante el Baskonia. El porcentaje de acierto fue solo del 31 % (11 de 35), después de un 0 de 6 en el tercer cuarto y un 3 de 11 en el último parcial. La magia se presentó en la pista con el nombre de Jordan Howard, que en el segundo tiempo extra se salió de la pantalla con 4 de 5 triples.

La peor actuación obradoirista desde el 6,75 fue en el triunfo en Sar sobre el Zaragoza (80-72). Solo 5 triples de 28 intentos (18 %), con un 0 de 4 en el primer cuarto y un 0 de 11 en los segundos diez minutos, es decir, 0 de 15 en la primera parte. En la derrota en Manresa, las estadísticas marcaron un 20 % (nada más que 6 de 30 triples). Los catalanes alcanzaron el 31 % de efectividad (11 de 35).

En esta última jornada, el Obra demostró que también sabe ganar sin triples. Logró la primera victoria en su historia en el palacio insular del Tenerife con un pobre 25 % de acierto (6 de 24).

Cambio de papeles

En Tenerife se cambiaron los papeles y el conjunto de Txus Vidorreta arrolló al Obradoiro desde el perímetro durante medio partido. En el primer cuarto, los isleños estuvieron cerca de la tormenta perfecta y firmaron un 85 % de efectividad (6 de 7 triples). El finlandés Sasu Salin no falló (3 de 3). Le acompañaron en el recital el súper veterano Marcelinho Huertas, Cook y Abromaitis. Solo salió desviado el tiro del canadiense Doornekamp. El Obra se mantuvo con vida, aunque muy lejos en el luminoso (29-20), con un porcentaje del 33 % (3 de 9). Acertaron Thomas Scrubb (2 de 2) y Álex Suárez (1 de 2). Fallaron Tinkle (0 de 2), Zurbriggen, Muñoz y Kovliar.

En el segundo cuarto, el Tenerife bajó al 60 % (3 de 5). Salin no estuvo tan fino y su muñeca le jugó un par de malas pasadas (1 de 3). Esta vez sí conectó Doornekamp y completó el americano Abromaitis. Por su parte, el Obra mantuvo el 33 %. (2 de 6 triples), pero con menor contribución: Zurbriggen y Kovliar.

Sin gasolina

En el tercer cuarto, el conjunto aurinegro se quedó sin gasolina, cambió el punto de mira, el tiro le salió por la culata y el marcador se igualó, aunque no fue gracias al acierto de los compostelanos desde el perímetro. Solo un 14 % en triples para el Tenerife (1 de 7). Nada más que se salvó del naufragio Fitipaldo (1 de 3), aunque el Obra todavía estuvo peor que su rival (0 de 6, con lanzamientos errados de Howard -2-, Zurbriggen, Badzim, Kovliar y Tinkle).

Este 0 de 6 del Obradoiro lo calcó en el último cuarto un desastroso Tenerife. El Obra mantuvo una vez más el 33 %, pero bajo mínimos: 1 de 3. Se salvó Scrubb, el gran protagonista del partido. Los compostelanos acabaron con un 25 % (6 de 24) y los canarios remataron la faena con un 40 % (10 de 25).