Vecinos de Santiago recurren a la linterna del móvil para abrir el portal por la mala iluminación de las calles: «Si no fuera por los escaparates, no se vería nada»

Margarita Mosteiro Miguel
Marga Mosteiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Residentes y comercio vinculan a la escasa intensidad lumínica una mayor sensación de inseguridad tras la última ola de robos

18 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

La realidad que muestran las fotografías que acompañan esta información deja poco más que decir. El alumbrado público de Santiago cumple a la perfección con la petición de los expertos para que se reduzca la contaminación lumínica, aunque vecinos y comerciantes consideran que «se han pasado de frenada». Así lo entiende la propietaria de un comercio de Galeras tras los robos de los últimos días. La queja generalizada de residentes y comerciantes es que la iluminación de las calles es tan tenue que, desde que se pone el sol, prácticamente resulta casi imposible ver a quien camina a un metro de distancia.

Roberto Almuíña, de la Asociación de Veciños Fonseca del Casco Histórico, advierte que hay zonas que «si no fuera por los escaparates, se quedarían totalmente oscuras a partir de las seis de la tarde. La luz que se pone es insuficiente». Apunta que, hace solo unos días, una vecina de la rúa Entremuros se llevó un buen susto al encontrarse de bruces con una persona que caminaba en sentido contrario: «No la vio hasta tenerla casi encima». El portavoz vecinal asegura que «la falta de luz es una de las quejas más habituales que nos llegan de los vecinos, y que nosotros trasladamos al Concello». Explica que «donde hay comercio, la situación es mejor, pero que pasen por A Travesa a las ocho de la tarde. Es una hora normal para volver a casa. ¿No?», plantea.

Si en el casco histórico reclaman un estudio «serio» para «situar mejor los puntos de luz y ganar en seguridad», la percepción del problema en los barrios no es menor. En Vista Alegre, el presidente de la Asociación de Veciños Álvaro Cunqueiro, David Ríos, señala que las luminarias que se pusieron tras la reforma «se averían con frecuencia. Pero, cuando funcionan, tampoco son adecuadas», lamenta. Los residentes en las calles Rianxo y Santa Uxía de Ribeira recurren a las linternas de sus teléfonos móviles para acertar a meter la llave en las cerraduras de sus portales. «No se ve nada», sentencia Ríos. Por algo los vecinos ya mostraron su disconformidad con el modelo de luminarias proyectadas para el barrio cuando se estaban haciendo las obras.

En Galeras, tras los últimos robos, los comerciantes han pedido a las autoridades que realicen una inspección del estado que presenta la calle cuando anochece. «Si no fuera por los escaparates, no se vería nada», denuncian en un local de hostelería.

También en varias calles del Ensanche la falta de luz «es alarmante», denuncia José Antonio Seijas, presidente de la Asociación de Comerciantes Comercio Punto Compostela. «En la rúa San Pedro de Mezonzo, en el tramo más próximo a la rúa da Rosa, hay que caminar con cuidado a partir de las ocho, porque no se ve nada», precisa. Y la misma situación, asegura Seijas, se repite en otras calles del Ensanche. «Sin las luces de los comercios, la nueva iluminación es oscuridad total», alerta.

Tres modelos para distintas zonas del casco urbano y las parroquias

Ante a las quejas de vecinos y comerciantes, que juzgan escaso e inadecuado el modelo de alumbrado, el Ayuntamiento de Santiago alega que está realizando una «renovación completa de todos os centros de mando e adecuación á normativa vixente», según aclaran fuentes municipales. El trabajo en relación con la iluminación de calles está orientado a la renovación con lámparas led de todos los puntos de luz que carecían de esta tecnología. Explican que se tiende a una uniformidad «na temperatura de cor das fontes de luz, mantendo 4.000 k (grados kelvin) en vías principais, 3.000 no rural e nas zonas da periferia, e 2.700 no casco histórico». Entre las actuaciones ejecutadas, Raxoi destaca la reforma completa de la iluminación de la rúa do Hórreo, praza Nosa Señora de Conxo, urbanización Tras Paxonal, Campus Vida y cementerio de Boisaca, y la supresión de 40 puntos oscuros.