Las obras en Santa Isabel ahogan al Natación y al Waterpolo Santiago

SANTIAGO

xoan a. soler

Ambos clubes hacen encaje de bolillos para cuadrar los entrenamientos y las competiciones a la vuelta del verano y hasta el 31 de enero

04 ago 2025 . Actualizado a las 22:18 h.

Pocas entidades como el Club Natación Santiago y el Waterpolo Santiago saben lo que es exprimir el rendimiento de las calles disponibles para entrenar en Santa Isabel y Sar, con mucho tráfico y poco espacio. Y el panorama se complica. A partir de septiembre podrán hacer suyo el lema circense del «más difícil todavía», porque las obras en la piscina de Santa Isabel, que se extenderán hasta el 31 de enero, obligarán a buscar alternativas y el municipio no está precisamente sobrado de instalaciones para los deportes acuáticos.

El problema sería una cuestión menor si el viejo proyecto de la llamada Ciudad del Agua, previsto en Santa Marta, hubiese visto la luz. Pero por Raxoi han desfilado partidos de todos los signos políticos y no ha habido avances en más de tres lustros. Si acaso, retroceso, porque si algún día sale adelante parece que será sin la joya de la corona, una piscina de cincuenta metros. La Ciudad de la Raqueta es otra iniciativa con mucha pompa y poca realidad, anclada en los cajones.

Sea como fuere, a la vuelta del mes de agosto el Natación Santiago y el Waterpolo Santiago se verán a las puertas de la nueva temporada. De momento, los dos clubes han planteado en la Federación que hasta febrero no podrán acoger competiciones.

La dificultad más inmediata pasa por solventar el asunto nada baladí de los entrenamientos. Sobre todo en el caso del waterpolo, que requiere la utilización de balones y hay piscinas que o bien no están preparadas o bien no se aprestan a tomar medidas para que se puedan utilizar las pelotas sin riesgos.

El Waterpolo Santiago lo único que tiene confirmado es que podrá seguir utilizando Sar después de la temporada estival, como venía haciéndolo. Pero ahí solo caben los benjamines, los alevines y los infantiles. Y no se pueden disputar partidos.

Falta por ver qué se puede hacer con las categorías superiores. Y, una vez que acaben las obras en Santa Isabel, si también se podrá utilizar la piscina los domingos por la tarde, para poder recuperar partidos acumulados en la primera mitad de la campaña.

El Club Natación Santiago tiene encarrilada la situación, asumiendo la necesidad de desdoblar los entrenamientos en cuatro ubicaciones distintas. Podrá seguir empleando Sar. Y encontrará alivio en la piscina universitaria, en la de la Ramallosa y, tres días a la semana, en las instalaciones del Colegio Peleteiro en Montouto.

Cabe significar que natación y waterpolo no son las únicas disciplinas afectadas. También sufren las consecuencias los equipos de triatlón, si bien en este caso sin el añadido de las competiciones.