Alada traición

Ignacio Carballo González
Ignacio Carballo LA SEMANA POR DELANTE

SANTIAGO

14 sep 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

El brutal rejonazo que le va a meter Ryanair a todo el sector turístico gallego con la anunciada reducción del 80 % de sus vuelos en Lavacolla y su marcha de Peinador a partir de octubre debe ser un antes y un después en la política aeroportuaria en Galicia, que si ha destacado históricamente por algo es por su ausencia total en la práctica y por la interesada inoperancia de los mecanismos de coordinación de las tres terminales. Con sus ayuntamientos entregados sin pausa, desde la irrupción de las aerolíneas privadas y especialmente en pos de la irlandesa hace ya más de veinte años, a un frenético y carísimo maratón localista por la obtención de resultados cortoplacistas, y con la Xunta mirando para otro lado, ahora tenemos la evidencia de que un sistema que ha crecido sobre pies de barro, a la larga solo engorda fatales consecuencias cuando la única fidelidad que genera es la de la cuenta de resultados y, por tanto, la del mejor postor de dinero público. Todo viajero mínimamente enterado sabe cómo Ryanair reduce costes y exprime ingresos para ofrecer vuelos a precios de autobús, un modelo de negocio tan cuestionable y denostado como exitoso porque, al fin y al cabo, todos somos turistas en algún momento. Que levante la mano el que no ha volado con la aerolínea irlandesa. El encarecimiento de las tasas de Aena es una excusa que el organismo estatal le ha brindado. El aeropuerto central de Galicia, que era el que más crecía en toda la red española y ahora es el único que pierde viajeros —incluso antes del tijeretazo— es el cabeza de turco que va a exhibir Ryanair como argumento de su fuerza ante todo aquel que se niegue a pasar por su aro. Le da la risa que Goretti cuestione sus métodos o que Abel la multe por incumplimiento de contrato. Su mayor rentabilidad no está en Galicia sino en los grandes aeropuertos, y el más próximo es el de Oporto. Pero ya basta. Las administraciones deben tomar nota y construir un modelo de tres aeropuertos coordinados, adaptado al AVE que revoluciona la conectividad con Madrid y que haga valer el potente atractivo turístico de Galicia, sin adulteraciones de talonario localistas. El cierre de Lavacolla por obras la próxima primavera es una circunstancia oportuna a tener en cuenta, y el Xacobeo 2027, una meta ineludible.