El IES de Arzúa ve recompensada su apuesta transversal por el medio ambiente con el gran premio Galicia de Voz Natura

Natalia Rodríguez Noguerol
n. noguerol ARZÚA / LA VOZ

ARZÚA

PACO RODRÍGUEZ

El tratamiento del consumo responsable mereció el galardón

15 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

El medio ambiente es la columna vertebral del Instituto de Enseñanza Secundaria (IES) de Arzúa. Las macetas con árboles, plantas y flores de verano que humanizan la fachada y la entrada principales del inmueble no son una mera declaración de intenciones. Tampoco los ramos de flores secas que dan la bienvenida en el recibidor del centro, que es, mire por donde se mire, un cuidado vergel. «Podería estar mellor», dice Mónica Pérez. Esta profesora de la rama agraria de formación profesional que se imparte en el IES arzuano habla del jardín del recinto, en el medio del que se levanta un invernadero en el que el alumnado cultiva los tirabeques y las lechugas que, luego, emplean en la cafetería del centro para elaborar pastel de guisante y bocadillos.

Lo cuenta Carlos Iglesias, también docente en la familia agraria, para explicar la implicación, sin excepciones, del conjunto de la comunidad educativa en Voz Natura, un programa de la Fundación Santiago Rey Fernández-Latorre que cuenta con el apoyo de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, la Diputación de A Coruña, la Fundación Alcoa, El Corte Inglés, la Fundación Ramón Areces e Inditex. El consumo responsable fue el tema central de la presente edición —la número 26—, en la que el IES de Arzúa obtuvo el gran premio Galicia. Un centenar de actividades se desarrollaron en el centro para avanzar en hábitos sostenibles y respetuosos con el medio ambiente, como la elaboración de jabones naturales con aceite usado, en el club de ciencias que coordina Roberto Amarelle, profesor en secundaria y bachiller.

Docente de Biología, Amarelle defiende que el IES del municipio arzuano «reúne todos os factores para traballar este tipo de actividades. Somos —explica—un instituto do rural, ofertamos a familia profesional de agraria, e contamos cun profesorado implicado e cun perfil de alumnado que tamén responde».

La participación llega también de las familias, tal y como subraya, por su parte, Mónica Pérez, que pone de ejemplo la aportación de estiércol que hicieron para abonar la finca de la que dispone el instituto para las prácticas del alumnado de los ciclos formativos de la rama agraria. Sus alumnos de básica prepararon el terreno, en el que, posteriormente, los del ciclo medio de producción agroecológica cultivaron arándanos, frambuesas, y grosellas. Es otra de las actividades de la propuesta interdisciplinar que valoró el comité científico de Voz Natura, que destacó especialmente la participación del centro educativo en eMprende, un programa de Ayuda en Acción que posibilitó el diseño, por parte del alumnado, de innovadores proyectos como el de extracción de resina de pino para su procesado en la industria alimentaria y cosmética.

Ese proyecto ha sido apadrinado por una empresa del sector forestal, tal y como subraya Carlos Iglesias, que valora el premio Galicia de Voz Natura como un reconocimiento a la docencia, «un oficio vocacional, en el que muchas veces nos dejamos la piel, invirtiendo un tiempo extra que no te reconoce nadie», reivindica. Con todo, «aquí nadie se cuelga una medalla», puntualiza Iglesias, que extiende el mérito al conjunto del centro, «desde los conserjes a las limpiadoras», dice.

Y es que las actividades que se desarrollan en el IES de Azúa para avanzar en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de la Unión Europea se abordan desde las diferentes materias tanto de secundaria y bachiller, como de los ciclos formativos de la familia agraria, y también de la rama administrativa, que se imparten en el instituto.

Igual filosofía rige la propia gestión del centro, que, como ganador del gran premio Galicia de Voz Natura, recibirá cinco mil euros para actividades ambientales, gracias al patrocinio de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda y de Sogama. Se invertirán en la compra de una máquina extrusora para transformar las botellas de plástico en hilos que se utilizarán en las impresoras 3D.