Una jabalina, vecina «mansiña» pero indeseada de Teo que daña cultivos y cruza tranquila la N-550
TEO

El animal tiene dos crotales en las orejas y fue grabado en la zona de A Casalonga
21 may 2025 . Actualizado a las 13:53 h.Cruzarte con un jabalí en cualquier lugar de Galicia está a la orden del día, pero que este ejemplar se pasee con cierta parsimonia y sin asustarse demasiado por la presencia del ser humano ya no resulta tan habitual. Fue este llamativo comportamiento lo que llamó la atención del vecindario de A Casalonga, en el municipio de Teo, que ha visto al animal varias veces en los últimos días, grabándolo en vídeo y también tomándole fotos.
Y fue al mirar con detenimiento las imágenes cuando se percataron de que no era un jabalí cualquiera, ya que en sus orejas cuelgan sendos crotales, indicativos que se colocan a los animales de distintas especies que pertenecen a explotaciones ganaderas por diferentes motivos.
En este caso, tiene un crotal amarillo y otro azul, lo que corrobora que no es tan salvaje como correspondería a su especie. De hecho, el crotal amarillo suele corresponder al DNI del animal, con datos sobre su nacimiento, mientras que el azul se coloca cuando se produce el traslado de una explotación a otra, o se refiere a un período de años concreto.

La explicación más plausible es que pueda formar parte de algún estudio sobre la especie o su control, pero esto no explica por qué campa prácticamente a sus anchas por A Casalonga y no tiene reparo alguno en cruzar la N-550 para pasear y también para buscar comida, la de los vecinos.
Nacho Iglesias es uno de los teenses que ha sufrido las consecuencias de tan particular visitante. «Levantoume as patacas ao outro lado da estrada e estivo fozando noutras hortas», relata, lo que confirma que el animal, «unha femia grandiña», cruza la N-550 sin que hasta ahora provocase accidente alguno.
Cerca de su casa, en el Camiño do Monte de Arriba, que arranca desde la N-550 hacia la mina de A Casalonga, vive María del Carmen Méndez Quintela, a quien el animal le dio un buen susto porque la noche del pasado día 12 estaba sola en casa. Fue su perro el que alertó de la presencia de la jabalina. «Sentín ladrar a Duque sobre as once da noite e vin unha cousa escura. Pensei que era un can, pero dixen ‘que can máis raro', e decateime que era un porco bravo, e víase moi mansiño, paseando con toda a tranquilidade do mundo».
Javier Andrade, vecino de la misma calle, también lo vio, pero al igual que a María del Carmen no le ha provocado ningún daño. Javier tiene dos perras, una muy pequeña, por lo que teme que la más menuda sí pueda correr peligro. «Sei que non atacan, pero se se ven comprometidos non sei o que poden facer», señala. Tras avistar al animal avisaron a la Policía Local y a Protección Civil de Teo, que se acercó a la zona pero no pudo localizarlo.