
Darío Rey considera «unha honra quitar a quen exerceu o cargo dende a mentira e o barro»
13 ago 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Touro cuenta desde ayer con un nuevo alcalde, Jesús Reboredo, que minutos antes de ser elegido mediante votación pública y nominal defendió la moción de censura para acceder al gobierno que no logró en mayo del 2023, cuando el PP se quedó a un concejal de la mayoría absoluta. El sexto voto que le faltó hace dos años se lo dio Darío Rey, edil que abandonó el Movemento Veciñal de Touro pero que no formará de su gobierno, que el PP ejercerá en minoría.
Antes de tomar posesión, Jesús Reboredo consideró la moción de censura «un exercicio de responsabilidade» que ofrecerá «unha alternativa de goberno aos veciños, dado que a actual situación é insostible». Reboredo, además de denunciar distintos incumplimientos del gobierno local y de acusarle de «chantaxear» a la oposición con los fondos del plan provincial de obras, cuestionó que Castro no elaborase ningún presupuesto, algo que, dijo, «vai en contra de toda a lóxica política que un goberno que chega por vez primeira ao poder non queira plasmar os seus proxectos e as súas promesas electorais». «Devolver a normalidade democrática» y gestionar el Concello con presupuestos anuales y garantizar el funcionamiento de los servicios también formaron parte de la hoja de ruta del nuevo ejecutivo popular
En su turno de intervención, Roberto Castro anunció que ejercerán una oposición «facilitadora» que nunca votará en contra de un plan de obras y acusó al ex concejal de su grupo y firmante de la moción de «ter uns intereses económicos persoais que basicamente son contrarios aos obxectivos do Movemento Veciñal de Touro». Castro resumió la moción de censura presentada por el PP y Rey como «unha regra simple de mercado, hai un elemento que se somete á venda e hai un grupo disposto a comprar».
Darío Rey abandonó la sesión antes de que Castro tomase la palabra y regresó cuando este terminó, renunciando también a su turno de palabra. Posteriormente, tras conocer las afirmaciones vertidas por el ya ex alcalde, Rey declaró que «xogar coa reputación allea vulnera o dereito á honra e pode ter consecuencias legais» y afirmó que «é unha honra quitar da alcaldía a quen exerceu o cargo dende a mentira e o barro».
Darío Rey señaló que como edil no adscrito fiscalizará la nuevo gobierno y velará por el cumplimiento del pacto de la moción de censura lo que implica, entre otras medidas, personarse en los procesos que afectan a la mina de Touro. Sobre la relación entre este proyecto y el cambio de gobierno se pronunció el portavoz del BNG, Xan Louzao. Crítico con la moción de censura y con el trabajo de Castro y su equipo, señaló que «ninguén cree que o PP vai cambiar a súa postura sobre a mina», aunque también acusó al gobierno saliente de «poñerse de perfil» sobre el proyecto pese a prometer lo contrario.

Amplio apoyo de regidores del PP y de Ignacio Codesido
Jesús Reboredo reconquistó ayer el gobierno de Touro para el PP estrenándose como alcalde. Y como tal fue recibido por un buen número de regidores populares del entorno que se acercaron al salón de plenos del consistorio para arroparlo en el ritual de la entrega del bastón de mando, algo que un alcalde solo puede ver en casos como una moción de censura, una fórmula que desde este verano es más factible, porque el Tribunal Constitucional ha dictaminado que un concejal que apoyó un gobierno puede en el mismo mandato firmar la moción de censura que apoye a otro candidato.
El histórico político y alcalde Boqueixón, Ovidio Rodeiro, junto con el recién estrenado en el cargo Alexánder Doval (Oroso) acudieron al debate de la moción de censura en el que también se dejó ver en el salón de plenos el regidor del concello vecino de O Pino, Manuel Taboada, afectado al igual que Touro por el proyecto para reactivar la explotación de la mina. También acudieron las alcaldesas de Boimorto, María Jesús Novo, y de Trazo, Josefina Suárez, junto a la primera teniente de alcalde de Ordes, Susana García. De la comarca ordense también acudieron los regidores de Frades, Roberto Rey, y Tordoia, Antonio Pereiro.
Todos, acompañados de distintos cargos municipales y del ex alcalde de Touro, Ignacio Codesido, con el que Reborido se fundió en un intenso abrazo, posaron en una foto de familia frente al consistorio.