Ocho sitios imprescindibles para comer un buen cocido en Santiago

VIVIR SANTIAGO

Divina Varela con su cocido, de los más cotizados de toda la capital gallega.
Divina Varela con su cocido, de los más cotizados de toda la capital gallega. Sandra Alonso

Aunque la subida de precios también ha pasado factura al cocido, quedan pocos restaurantes ya en Compostela y su comarca con capacidad de reserva. Del menú por 26 euros de Casa Antonio a los 38 del Paz Nogueira, estas son algunas propuestas para disfrutar de la receta estrella de la gastronomía del entroido

06 feb 2023 . Actualizado a las 18:11 h.

Ha llegado el momento que muchos estaban esperando: con la proximidad del carnaval, los cocidos copan las mesas de mitad de Galicia, tirando por lo bajo. Los que no lo cocinan, bien porque no quieren o porque no tienen infraestructura para el despliegue que requiere, tienen muchas posibilidades en Santiago de Compostela y su comarca para simplemente sentarse y disfrutar de este plato. 

La inflación le ha afectado, como a todo, pero el cocido sigue siendo popular en la mayoría de los restaurantes consultados. Los hosteleros se resisten a subirle el precio y se centran en frotarse las manos con la buena temporada que parece estar al caer, aunque muchos ya la llevan practicando desde hace meses con muy buen resultado. Tanto es así que abundan más las casas de comidas en la comarca de Compostela que ya no tienen capacidad para dar de comer a nadie más que las que todavía disponen de sitio. 

Si alguien quiere intentarlo, está a tiempo de probar suerte en algunos de los siguientes restaurantes, que se han erigido como auténticos templos del cocido en estas fechas. Su fama es tal que algunos de ellos registran reservas de un año para otro, algo que sirve para hacerse a la idea de lo encantados que quedaron los grupos de comensales.  

La casa de los mil cocidos

Restaurante Paz Nogueira

Uno de las leyendas de Compostela, con sus poco menos de dos siglos de historia, es el restaurante Paz Nogueira. Ha ido pasando de generación en generación hasta el día de hoy, que está en manos de Eduardo Paz. Hay futuro, eso está claro, y más si el establecimiento continua ligado a platos tan suyos como el cocido. Ellos ofrecen el menú completo por 38 euros, pero tienen la alternativa de pedir solamente una ración de carne por 20. En su caso le añaden botelo, a pesar de no ser una de las carnes típicas de la zona.

Los fines de semana los tienen completos, contando con algún hueco durante la semana, que se puede solicitar con reserva previa. Su tráfico de comensales es muy elevado, llegando a servir mil platos en toda la temporada, y dan gracias a que su comedor es amplio.

Eduardo Paz con su hijo y su nieto, haciendo gala de lo familiar que es un restaurante como el suyo.
Eduardo Paz con su hijo y su nieto, haciendo gala de lo familiar que es un restaurante como el suyo. Sandra Alonso
  

Todavía con reservas

Restaurante Susos

El suyo es uno de esos cocidos tradicionales, también con botelo y chorizo de cebolla. A su menú, durante el carnaval, le añaden filloas y oreja para el postre, además de otras opciones, café y licores. El montante de este servicio alcanza los 35 euros. Poseen, del mismo modo, una versión reducida del producto que sirven en forma de ración por 22.

Ellos lo hacen los jueves y los domingos, también con reserva previa. Y ojo, porque es de los pocos sitios en los que todavía se puede encontrar mesa para este fin de semana, con lo que todos aquellos que lo deseen tienen una buena oportunidad de gozar del mejor producto en una de las casas de toda la vida en San Marcos.  

cocido de porco celta

O Fogar do Selmo

En este paraje natural que es O Fogar do Selmo, en Urilde (Rois), sirven uno de los cocidos más especiales de toda la comarca. En él, el protagonista es el porco celta, que ellos mismos crían. Incluyen, a su lado en la cazuela, gallina y cachena, pero no botelo. El menú de este establecimiento suma 35 euros e incluye bebida, licores y postre, entre los que se encuentran las orejas o las filloas, que hacen ellos mismos. 

Tienen buenas sensaciones para este año, en el que servirán el cocido durante los fines de semana. Es aconsejable, en todo caso, acudir con reserva y al menos se han de sumar cuatro personas a la cita. Por el momento se puede encontrar algún hueco, pero su gerente, Ana Tomé, se congratula de que la gente le tiene muchas ganas y está encontrando una alta demanda este invierno.

En O Fogar do Selmo son ellos mismos quienes se encargan de preparar sus filloas.
En O Fogar do Selmo son ellos mismos quienes se encargan de preparar sus filloas. Sandra Alonso
  

calendario completo

Casa Antonio

En la insigne Casa Antonio, sita en el compostelano barrio de Vista Alegre, tienen todo el cocido vendido. Reservan con mucho tiempo de antelación y, al tener un local pequeño, todos los que se llevan el plato a la mesa son clientes habituales.

De todos modos, vale la pena describir uno de los menús más baratos de la ciudad, por tan solo 26 euros, y que lo incluye todo menos el botelo. De postre se sirve queso con membrillo y natillas o arroz con leche, a elección y en el centro de la mesa, para que todos los que estén sentados se puedan servir sin cortarse.   

Reservas de un año para otro

Café Bar Rodeiro

Uno de los más míticos restaurantes de Santiago para llevarse un buen cocido, unos buenos callos, o lo que se tercie, a la boca. El Rodeiro, en la entrada de la rúa de San Pedro desde la parte histórica de Compostela, está regentado por Divina Varela y su marido desde hace décadas, algo que lo convierte automáticamente en una cita asegurada con el buen comer. Un restaurante popular, donde disfrutar de uno de los menús del día clásicos de la ciudad.

Precisamente, el cocido se incluye en el plato del día los martes. Para el cocido especial, su menú completo, habrá que esperar al año que viene, pues tienen todo reservado hasta el final de la temporada, a finales de abril. El de Divina contiene todo lo que se le puede pedir a un cocido con mayúsculas: pata de cerdo, costilla, panceta, oreja, carne de ternera, lacón, pollo, morros, cacheira, espinazo, chorizo de carne y de cebolla, garbanzos, patatas y filloas para acompañar. Y de postre, queso con membrillo, bizcocho casero y orejas, además de licores y vino de la casa para beber.

Semejante cantidad de comida por 30 euros. «E se a alguén lle sobra pode levar un táper, que llo dou eu», asegura Divina, que lo tiene todo. Ella se mueve entre los seis y los 24 comensales, que prácticamente ocupan el local entero del Rodeiro. Todos ellos son clientes habituales del bar, que ya le dejan encargado de un año para otro, «e logo avísanme uns días antes de que van vir, así ben nos aclaramos».

Divina Varela con su cocido, de los más cotizados de toda la capital gallega.
Divina Varela con su cocido, de los más cotizados de toda la capital gallega. Sandra Alonso
  

Solamente cocido

Casa Barreiro

Ubicada en San Xián de Sales, Casa Barreiro se tira desde noviembre sirviendo solamente cocido a todo el que reserva una mesa. Para hacerlo se han de ser, al menos, veinte a comer, pues para grupos de menos personas no se llevan a cabo reservas.

El menú comienza con la empanada de cocido, que ellos mismos hacen con picadillos de días anteriores. Una vez degustada, se sirve la parte principal de la velada, el cocido, que se divide en la unidad básica (cacheira, lacón, costilla, grelos y patata) y la parte a mayores, en la cual se le va cortando carne al comensal a su gusto. Se puede disfrutar en este momento de botelo, que gusta mucho, por ejemplo, además de oreja, lengua o morro. 

Para el postre cambian lo esperado, pues se van a una oferta más fresca, compuesta, por ejemplo, por tarta de queso, de piña o fresas con nata, en lugar de las tradicionales orejas o filloas, que sí sirven durante el cocido como tal. Todo el menú se puede comer por 35 euros, aunque a estas alturas de temporada ya carecen de capacidad de reserva hasta el año que viene. De igual forma que otros restaurantes, ocupan sus plazas de un año para otro, a lo largo de una temporada de cocido que en Casa Barreiro dura de noviembre a marzo.

Manuel Barreiro, su gerente, asegura que este año tiene pinta de ser muy bueno, a pesar de la inestabilidad económica que persiste. Agradece mucho las campañas llevadas a cabo desde Lalín, que dice haber puesto al cocido de moda, «aínda que nós levamos anos facendoo en exclusiva durante todas estas datas».   

O lacón entero o nada

Casa Rosinda

Un cocido o es abundante o no es. En Casa Rosinda (Trazo) son maestros de este plato, y por eso lo sirven como mínimo para seis comensales. Hacerlo para menos sería ridículo, pues en su caso sirven sobre la mesa lacón y cabeza del cerdo enteros. Además, otro de sus atractivos es que ofrecen al mismo tiempo que estos platos cárnicos también las filloas.

Si tienen sitio, hacen reservas para días por semana, de modo que en sus cocinas se prepara cocido todos los días menos los lunes, porque cierran. Alberto González, su gerente, aconseja reservar al menos con una semana de antelación, para que las carnes desalen correctamente. En total, disfrutar de su menú cuesta 35 euros, como la mayoría de la oferta comarcal.

El menú de cocido de Casa Rosinda, en todo su esplendor.
El menú de cocido de Casa Rosinda, en todo su esplendor.
  

los últimos en abrir la temporada

Restaurante Nyeto

En el restaurante Nyeto son de los más precavidos a la hora de abrir la temporada del cocido, pues han esperado hasta la llegada de febrero. En su caso lo servirán los sábados siguiendo las pautas más tradicionales, hasta el punto de que le han retirado el botelo para hacerlo más fiel a las recetas de nuestra comarca. De nuevo, el menú completo se comercializa por 35 euros.