Así caló en Santiago el «¡Montoya, por favor!» antes de volverse viral: «Nos hubiera gustado traerlo con Manuel, con el que le fue infiel la novia»
VIVIR SANTIAGO
José Carlos Montoya, protagonista indiscutible de esta edición de «La isla de las tentaciones», dio un bolo en la discoteca Circus el pasado jueves, antes de que sus imágenes corriendo por la playa dieran la vuelta al mundo
12 feb 2025 . Actualizado a las 14:08 h.El desesperado grito de Sandra Barneda para calmar a José Carlos Montoya, concursante de La isla de las tentaciones, mientras este corría hacia la villa en la que se hospedaba su pareja, Anita, que le estaba siendo infiel, ha dado la vuelta al mundo. Ese clip de apenas unos minutos en el que la presentadora entona un «¡Montoya, por favor!» ha sido utilizado por perfiles como los de KFC, Netflix, la Fifa y otras cuentas deportivas de clubes internacionales para ensalzar jugadas de deportistas que se desmarcaban de sus contricantes, emulando la maratón del andaluz por la playa. Hasta la tertulia matinal de Whoopi Goldberg en la ABC estadounidense se ha hecho eco del vídeo, sobre el que no dudan en decir que «se merece un Emmy». Eso sí, antes de cruzar el charco, José Carlos Montoya pasó por Santiago.
El andaluz fue el protagonista de un bolo el pasado jueves en la compostelana discoteca Circus, antes de que sus imágenes dieran la vuelta al globo terráqueo. «Lo teníamos contratado desde hacía quince días. Vimos su perfil, por donde iba y nos gustó, pero justo encajó en el momento perfecto», cuenta Fernando Pazos, gerente del local del Ensanche. Presume de que el de Santiago ha sido el único bolo de Montoya en Galicia y de que, por lo que parece, lo va a seguir siendo. Además, llegó en el momento exacto. El vídeo del concursante corriendo por la playa ha trascendido de la televisión y de las redes sociales, convirtiéndose en un acontecimiento mundial que llega incluso a análisis más complejos. «Podría cambiar la telerrealidad para siempre», dice el periódico británico The Guardian en su análisis del fenómeno viral, que acumula ya más de 200 millones de visualizaciones. Cree que el clip supone un antes y un después, una nueva marca a batir en el género y que ha dejado todo lo que ha pasado en los últimos años en los realities por los suelos.
La aparición del concursante en Santiago, además, tiene historia. Cuenta Fernando Pazos que la idea era que coincidiera en una misma noche con Manuel, el tentador con el que le engañó su pareja, Anita. Fue la escena de ellos dos cometiendo la infidelidad la que desencadenó en el vídeo de Montoya corriendo por la playa a grito de «Me has roto por dentro». Cuadrar agenda fue imposible y Manuel, que también participó en ediciones pasadas de La Isla de las tentaciones, protagonizó una de las noches de la semana anterior. Para ambos bolos las entradas «volaron». Cuenta el gerente que se agotaron en cuestión de minutos, un sold-out que los pilló hasta a ellos por sorpresa.
Sobre Montoya no tiene más que buenas palabras. «Trató con toda la gente, lo hizo muy bien. Se paró con todo el mundo a sacarse fotos y a hablar», recuerda Pazos. El concursante terminó sin camiseta, emulando algunas escenas del programa en las que, dlido por los comportamientos de su pareja, se arranca la camisa y se queda sin ella. El gerente lo define como «una persona muy cercana y natural»: «No paraba de moverse, se entregó al cien por cien», sentencia.