Científicas salen del laboratorio para reivindicar su derecho a ser madres

m. cedrón REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Change.org

La gallega María de la Fuente fue una de las primeras en visibilizar la discriminación que sufren al tener hijos

17 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Año 2018. Dedicarse a la investigación y ser madre con derecho a cuidar de los hijos deberían de ser asuntos compatibles, pero la realidad no es como recogen los discursos que hablan de conciliar la vida familiar y laboral. Por eso, varias científicas han salido del laboratorio para respaldar la campaña #oCientíficaoMadre, promovida a través de Change.org por la directora de la unidad de Nano-Oncología en el Instituto de Investigación Sanitaria de Santiago de Compostela, María de la Fuente, para reivindicar cambios que les den la oportunidad de desarrollar su carrera y no renunciar a tener hijos. No les valen buenas palabras, quieren que haya voluntad real para cambiar las cosas. Por eso, a través del hashtag #oCientíficaoMadre, animan a que otras mujeres cuenten sus casos en Twitter.

María De la Fuente fue una de las primeras en dar visibilidad a un problema que está más arraigado de lo que parece en España. Su historia, que sigue viva través de una campaña en Change.org y que va dirigida al Instituto de Salud Carlos III para instarle a que no discriminara a las mujeres científicas por ser madres, es una prueba de la desventaja con la que juegan las chicas en el terreno de la investigación. Lo que le ocurrió a María es que el período que estuvo de baja maternal le fue contabilizado como tiempo de trabajo, a pesar de que es imposible sumar méritos en esa etapa, con lo que sus opciones para optar a un ascenso fueron menos que las de otros colegas.

Varios meses después de que hiciera público su caso, esta investigadora ha emprendido esta nueva campaña para animar a las científicas a contar sus casos de discriminación. Otras tres compañeras -Carmen Agustín, bióloga y doctora en Neurociencias; Diana de la Iglesia, ingeniera informática y doctora en Inteligencia Artificial, y Ana Isabel González-Tablas?, ingeniera de Telecomunicación y doctora en Ingeniería Informática- se han animado a aparecer en un vídeo en el que hablan de sus experiencias o de casos que han tenido oportunidad de conocer.

«El objetivo -dice María- es visibilizar qué pasa en la ciencia, porque el mío no es un caso aislado. No es un tema del que se hable, porque resulta complicado que las mujeres afectadas den a conocer sus casos, pero es algo que está muy normalizado. Para ser competitivas no podemos permitirnos ningún obstáculo. Por eso, es muy importante hacer una campaña que evidencie que es un tema que está ahí».

Carmen Agustín, otra de las protagonistas del vídeo, explica que no ha sufrido directamente esa discriminación, porque su hija aún es pequeña. «Pero conozco casos», apunta. Hace referencia a uno en el vídeo. «Es el de una investigadora al que se le llegó a apuntar que había tirado su carrera por la borda al quedarse embarazada. También existen experiencias de gente a la que no les han renovado sus contratos», asegura. Esa misma investigadora se fue al Reino Unido, donde le adaptaron el horario.