Una nueva terapia reduce a la mitad el avance de un tipo de cáncer de pulmón
SOCIEDAD
Es un tratamiento personalizado en el que ha participado el Hospital de A Coruña
27 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.La medicina de precisión, por la que cada paciente recibe un tratamiento personalizado ajustado a sus necesidades en función de su perfil genético, es ya más una realidad en la práctica clínica que una mera esperanza. Especialmente en cáncer son cada vez más las terapias dirigidas, un arsenal terapéutico que ahora suma un nuevo fármaco para un determinado subtipo de tumores de pulmón gracias a un ensayo internacional en fase III en el que ha participado de forma destacada el grupo de Oncología del Complejo Hospitalario Universitario da Coruña (Chuac).
El estudio se ha publicado en la revista The New England Journal of Medicine, la más importante en el ámbito médico, y acaba de presentarse en la conferencia presidencial del Congreso Mundial de Cáncer de Pulmón celebrado en Ontario (Canadá), lo que da idea de la magnitud del avance. El ensayo clínico, realizado en 275 enfermos de varios países y coordinado por la Universidad de Colorado, ha demostrado que el fármaco Brigatinib reduce a la mitad el riesgo de progresión de la enfermedad o muerte con respecto al tratamiento convencional en pacientes con cáncer de pulmón que presentan una determinada alteración genética, la traslocación del gen ALK. Se trata de un subtipo que afecta al 5 % de todos los pacientes con cáncer no microcítico de pulmón en fase avanzada. En España podrían beneficiarse del nuevo tratamiento, para el que ya solo falta la aprobación por parte de las autoridades regulatorias para su uso clínico, en torno a unos 500 enfermos al año.
«Quizás no sean muchos pacientes, porque se trata de una terapia dirigida, pero para ellos va a suponer un cambio muy importante», explica la oncóloga del Chuac Rosario García Campelo, que participó en la presentación del estudio en el congreso de Canadá. Con un tratamiento convencional la tasa de supervivencia se ha establecido en diez meses y, aunque con la nueva terapia aún no existen datos porque los participantes en el ensayo todavía se están medicando, lo esperado es que sobrevivan durante mucho más tiempo.
Los afectados por este subtipo de tumor de pulmón en fase avanzada, para los que va dirigido el fármaco, suelen tener metástasis cerebral -la presentaban un 30 % de los participantes en el estudio-, por lo que también es vital actuar sobre este órgano para limitar la expansión de las células malignas. Con el tratamiento convencional la respuesta positiva para estos casos es de un 30 %, mientras que con el nuevo, que recibirá el nombre comercial de Alenbrig, la mejora se eleva al 80 %.
«Somos el hospital de España con más presencia en este estudio, por encima del Vall D’Hebrón. Para mí es un orgullo publicar en una revista considerada como la biblia de la medicina, pero también es un reconocimiento internacional para el hospital y para todo el equipo de oncología y para los propios pacientes», destaca García Campelo, quien también considera vital identificar a los pacientes que son candidatos al nuevo fármaco. Para ello se realiza el test ALK, que, de media, en España se aplica al 70 % de los enfermos con cáncer de pulmón. En el hospital de A Coruña, por contra, el porcentaje de casos analizados supera el 90 %, por lo que «nuestra probabilidad de identificar a los pacientes es muy alta».
Tratamiento combinado
En el congreso mundial de Canadá el Grupo Español de Cáncer de Pulmón, representado por Mariano Provencio, también presentó un innovador estudio en el que revela que un tratamiento combinado de quimioterapia e inmunoterapia antes de una cirugía reduce o prácticamente elimina el cáncer de pulmón en fase tres en el 75 % de los pacientes. De confirmarse los resultados del ensayo, aún en fase II y realizado en 46 personas, supondría un avance fundamental para los enfermos. Pero todavía es pronto.
«Los resultados son muy llamativos, pero todavía hay que tomarlos con cautela. De momento no cambia la práctica clínica asistencial, aunque habrá que seguir desarrollando la idea», señala García Campelo, cuyo equipo también ha participado en el trabajo.