![Bañistas en Samil en el puente de mayo del 2014](https://img.lavdg.com/sc/SCP-7mycSQZywqocSS4xgvHTFL8=/480x/2019/04/30/00121556625302207142911/Foto/GY1P50F2_135417.jpg)
De jueves a domingo el anticiclón dominará la meteorología, aunque las mínimas seguirán bajas
30 abr 2019 . Actualizado a las 19:22 h.Hasta el 40 de mayo no te quites el sayo. Así reza el refrán, pero este año parece que la chaqueta nos la podremos quitar estos días, y quienes disfruten de este largo puente tras el festivo tendrán sol asegurado en cualquier punto de Galicia, con temperaturas más elevadas en el sur.
En principio, la jornada de este miércoles será la más insegura, ya que las altas presiones irán entrando de forma progresiva desde las Azores, y a primeras horas habrá todavía muchas nubes, más compactas cuanto más al norte, sobre todo en la franja atlántica. En el resto de Galicia el sol lucirá sin problemas. Y esa nubosidad de la costa norte irá desapareciendo poco a poco a lo largo del día, y por la tarde los cielos estarán despejados en casi todos los rincones de nuestra geografía. Las temperaturas, además, irán ascendiendo de forma progresiva, al menos las máximas, porque las mínimas se mantendrán todavía bajas. Esto provoca situaciones como la de Vigo, en la que la variación térmica es grande con una mínima de 9 grados y una máxima de 24.
A partir de este jueves, la situación se mantiene soleada en las cuatro provincias, a excepción de alguna que otra nube en la costa de A Coruña y Lugo. Las máximas todavía subirán un poco, aunque en el norte no alcanzarán los 20 grados, mientras que en el sur superarán los 25. El viernes el tiempo será muy parecido, y ya el sábado y el domingo las máximas ascenderán también en el norte, aunque se quedarán en la barrera de los veinte grados.
Datos del 2018
El mes de mayo suele ser un mes de extremos en nuestra comunidad. Se pueden dar días de lluvia y frío propios del invierno junto a olas de calor que disparan las temperaturas. El año pasado, el mes comenzó de forma totalmente diferente a la de este año: bajo la influencia de una borrasca que dejó en los dos primeros días lluvia generalizada, aunque no muy intensa, y bajas temperaturas. Sin embargo, el día 3 un anticiclón llegó en forma de cuña desde las Azores, proporcionando estabilidad, por lo que las temperaturas comenzaron a recuperarse y los cielos se limpiaron de nubes.
Este anticiclón se fue extendiendo en los días siguientes hacia las islas británicas y desde allí, la posición no solo trajo estabilidad sino también aire caliente del sur, por lo que las temperaturas fueron muy altas. Entre los días 5 y 7, muchos lugares del interior superaron los 30 grados y en las Rías Baixas, los termómetros marcaron valores superiores a los 25 grados. Pero a partir del día 8 las borrascas volvieron y el calor fue reemplazado por el frío y la humedad. Por eso, y a la vista del caprichoso funcionamiento de mayo, de momento habrá que disfrutar del sol sin guardar de forma definitiva el paraguas.