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El presentador de «A liga dos cantantes extraordinarios» es un conversador excepcional
06 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Bronceado, bien afeitado y con patilla larga y fina, Paco Lodeiro (A Coruña, 1965) comparece en la cafetería de Cabanas en la que me había citado. El presentador del programa de moda admite que es un incontinente verbal y lo demuestra durante una larga conversación en la que en algún momento me cayeron las lágrimas de la risa. No hagan caso al titular, Lodeiro cuenta historias como nadie.
-¿Qué tal con La liga de los cantantes extraordinarios? Han dado en la tecla, ¿no?
-Aunque ahora me dedique a crear formatos de televisión, empecé haciendo imitaciones, que es una consecuencia de fijarse mucho en las cosas. Estamos en una época en que la música en la tele solo interesa si son talents shows y creo que hay que ser sincero con la realidad. El cantante de una orquesta, a lo largo de la noche tiene que contentar a los padres, a los hijos y a los abuelos. Poner en danza un programa donde los cantantes tienen que pasar de un estilo musical a otro parecía una buena idea.
-¿Esperaba este éxito?
-Empezamos enfrentándonos a Supervivientes pero fuimos lo más visto después de la Pantoja. En esto de la tele, no es solo lo que haces sino también a lo que te enfrentas.
-Usted tiene una productora de televisión, pero también está en la promoción inmobiliaria.
-Por tradición familiar. En realidad, el auténtico Paco Lodeiro es mi padre, yo soy un sucedáneo, ja, ja. Él se dedicó a la construcción toda la vida y ahora el negocio familiar lo lleva mi hermano, que estudió Económicas.
-Porque usted empezó como ¡profesor de informática!
-Bueno, aún tengo la plaza en propiedad. La verdad es que nunca pensé que podría vivir del entretenimiento. Mi primera ilusión era vivir del fútbol. Descartado eso, me fui a Madrid a estudiar Informática. Al llegar me ofrecieron una sustitución, fui a unas oposiciones y aprobé.
-Al fútbol sí jugó...
-Sí, en las categorías inferiores del Dépor, en el Sin Querer...
-¿...?
-Es el equipo de Labañou, el decano del fútbol modesto coruñés. Debe su nombre a un amistoso en el que fueron invitados a comer y ganaron al equipo anfitrión. Para no quedar mal, dijeron que habían ganado sin querer. Y le quedó el nombre.
-De chaval seguro que era el gracioso de la clase.
-Seguro, ja, ja.
-¿Cuántas veces le echaron?
-Unas cuantas. Pero sacaba buenas notas.
-Estuvo diez años presentando Cifras y Letras en Telemadrid, casi le alcanza el síndrome Jordi Hurtado...
-Sí, ja, ja. Los últimos cuatro fueron compaginando con la versión en gallego. Lo razonable era haber seguido, pero lo dejé por razones familiares.
-Seguro que, en tantos años, atesora alguna anécdota jugosa...
-Pues sí. Recuerdo un chaval que vino a concursar y que cayó eliminado enseguida. Pero nos preguntó si podía venir su novio a concursar. Le dijimos que sí y allí apareció. Si recuerda la dinámica del programa, había la posibilidad de hacer una palabra con nueve letras que daba 18 puntos y casi decantaba el concurso. Pues este chaval empezó a decir: «¡Tengo la de nueve, tengo la de nueve! Pero mi madre me va a matar».
-¿Y qué palabra era?
-¡Enculando!
-¿Y valió?
-Por supuesto. Allí estaba el experto, en horario de protección infantil, explicando que era sinónimo de sodomizando.
-Usted es polifacético. También canta.
-Yo soy hablador, proclive a la conversación y a la broma, pero cantar es lo que mejor se me da. Y sin embargo, es lo que menos rentable me resulta. Aún sigo haciendo cosas en el mundo de la música.
-Le voy a someter a los clásicos: defínase en cuatro palabras.
-Entusiasta, optimista, compañero y... algo que defina la capacidad que he tenido para rodearme siempre de gente muy buena para trabajar.
-Ahora explique qué es Galicia a alguien que no la conozca.
-[Se lo piensa un poco] Galicia es un lugar maravilloso... muy mal explotado.
-¿Tiene tatuajes?
-Le voy a contestar lo contestó Cañita Brava cuando le preguntaron si tenía carné de conducir [y adopta la inconfundible voz de Cañita Brava]: «No, pero lo pude tener», ja, ja.
-Por cierto, ¿qué tal se lleva con Paco Vázquez y toda la gente a la que imita?
-Muy bien. Tengo muy buena relación con todos ellos.
-¿Qué le gusta hacer fuera del trabajo?
-Podría decir correr, pero diré más bien trotar. Ir al fútbol también. Soy muy normalito.
-¿Tiene un lugar favorito?
-Centroña.
-¿Se arrepiente de algo?
-Bueno, he metido la pata muchas veces, pero asumo todo lo que hice.
-Dígame una canción.
-Tougher than the rest, de Bruce Springsteen.
-¿Qué es lo más importante en la vida?
-Tener conciencia. Venir de bien, que se dice en coruño.