Las dos caras de Lugo ante el coronavirus: calles vacías y supermercados llenos

María Guntín
María Guntín LUGO / LA VOZ

SOCIEDAD

Se vivieron momentos de tensión en las colas, a las puertas de los establecimientos, que ya han limitado el aforo en su interior

15 mar 2020 . Actualizado a las 14:26 h.

Lugo se prepara para afrontar la crisis del coronavirus. Ayer, en las calles, se acumularon colas de gente a las puertas de los supermercados, con aforo limitado ante el nuevo estado de alarma. Para ello, cerraron algunas puertas y desactivaron la apertura automática de las mismas. Los encargados explican que la orden viene de central y que, precisamente, busca evitar las aglomeraciones. Se vivieron momentos de tensión en algunas de las tiendas, especialmente transitadas por personas mayores. «Dejad la separación, no os acerquéis» fue una de las frases más escuchadas en las calles de la ciudad.

En el centro comercial As Termas, las tiendas no abrieron este sábado y solo lo hizo el supermercado principal, la tienda de alimentación para mascotas y otro comercio ecológico. La afluencia de gente fue normal, aunque continua, desde la apertura del centro comercial. La zona de tiendas permanece cerrada con un cordón que impide el paso al público y con varios carteles que advierten de las medidas. Asimismo, en el supermercado principal, un cartel informa de que se están extremando las medidas de higiene entre los trabajadores y que el aforo está limitado a 833 personas. Además, y ante la alta demanda de los últimos días, desde la cadena de alimentación informaban de que estaban haciendo aprovisionamiento para garantizar así la distribución. Asimismo, desde el supermercado explicaban que aumentó notablemente la demanda de cables de red para trabajar desde casa. 

En el hipermercado de As Saamasas, ayer se agotó la leche poco después de la apertura y no se repondrá hasta el lunes. Lo mismo ocurría con el papel higiénico, con los pañuelos de papel y con las pizzas. Las conservas y los yogures escaseaban y lo mismo ocurría con el fiambre envasado.

En las gasolineras, se nota la bajada de los combustibles pero, explican, la demanda no ha aumentado como se esperaría ante la caída del precio.

Las calles del centro, vacías

En el centro de la ciudad, la Praza Maior infundía una imagen atípica: silencio y vacío. Eran pocos los transeúntes que pasaban por la zona y algunos llevaban mascarilla e incluso guantes, a pesar de que las recomendaciones recuerdan que no es aconsejable. Todos los comercios estaban cerrados y los bares, con el cierre a medio echar, recogían las últimas mesas de las terrazas para apilarlas, a la espera de la evolución del coronavirus y de las medidas para afrontarlo.

También en las calles del centro había alguna peluquería abierta. En los estancos de la ciudad imperaba la normalidad frente a las colas que se acumulaban en otras zonas del país. Algunas de las farmacias de Lugo ya han instalado cuerdas para separar a los clientes que entran y que se informan a través de varios paneles, que indican que la distancia mínima que debe mantenerse es de un metro.

En Lugo son nueve los casos positivos de infección por coronavirus confirmados por la Consellería de Sanidade.