La allegada quiere agradecer de esta forma el trato que recibieron durante la investigación del crimen de Denise Pikka
07 abr 2020 . Actualizado a las 15:20 h.El último gesto de solidaridad hacia la sociedad española en la lucha contra el COVID-19 llega desde Hong Kong. En concreto de la familia de Denise Pikka, la peregrina americana que fue asesinada en el 2015 cuando realizaba el Camino de Santiago, ha donado 1.100 mascarillas a España como muestra de agradecimiento por el trato que recibieron durante la investigación del crimen y la labor desempeñada por la Policía Nacional.
Según han informado a Efe fuentes cercanas a la familia, ha sido una prima de la víctima, D.Y., residente en Hong Kong, quien ha tenido la iniciativa y quien se puso a gestionar para hacerse con mascarillas y enviarlas a España. La allegada de Denise, cuya familia es de origen chino, quería reconocer cómo en España «se volcaron» con ellos a pesar de la tragedia. Al informarse de que la crisis sanitaria se acrecentaba de forma exponencial en el país ibérico, D.Y. decidió involucrarse de la única manera que creía posible.
La familiar se puso en contacto con una de las personas que Denise había conocido mientras realizaba el Camino y que le inspiró más confianza porque hacía la ruta con niños. Precisamente, en una de las etapas este caminante prestó a Denise el teléfono móvil para que enviara unas fotos a su hermano, por lo que la familia pudo contactar con ese peregrino cuando tuvo constancia de la desaparición de la estadounidense. Ahora, la prima de Denise echó mano de esta persona para poder hacer llegar a España las mascarillas, muchas de ellas FFP2 y otras quirúrgicas.
El gesto no ha sido sencillo, ni barato, ya que ha tenido que pagar los impuestos aduaneros y realizar varios envíos, que finalmente han podido ser recogidos en el aeropuerto madrileño y entregados a Protección Civil para el reparto que las autoridades estimen conveniente.
Un camino sin final
Denise Pikka Thiem viajó a España en marzo del 2015 para «encontrarse a sí misma», según había relatado su hermano Cedric, en su declaración por videoconferencia desde Estados Unidos. Tenía 41 años cuando fue asesinada y había emprendido esta aventura con trágico final tras quedar impresionada con la película «The way» sobre la Ruta Jacobea que dirigieron sus compatriotas Martin Sheen y Emilio Estévez.
El 5 de abril de 2015, Denise se desviaba de la Ruta Jacobea y fue a parar, en León, a las inmediaciones de la vivienda de Miguel Ángel Muñoz Blas, de 41 años. Su agresor la abordó, la golpeó con un palo hasta la muerte y le cortó las manos para borrar huellas antes de enterrar el cuerpo.
Fue la última noticia que se tuvo de ella hasta que, el 11 de septiembre de ese año, el acusado les condujo horas después de ser detenido en Asturias hasta el lugar donde estaba el cadáver, a unos 2,5 kilómetros de su vivienda, en un paraje de difícil acceso entre las localidades de Santa Catalina de Somoza y San Martín de Agostedo. Muñoz Blas fue condenado a 23 años de cárcel por este asesinato.