Los tijeretazos a la BBC podrían dejar al Reino Unido sin una de sus grandes armas diplomáticas

Juan Francisco Alonso LONDRES / E. LA VOZ

SOCIEDAD

Jeff Overs / BBC

Junto a la monarquía, la corporación de radio y televisión es considerada uno de los pilares del llamado «poder blando»

02 oct 2022 . Actualizado a las 09:25 h.

Tras la desaparición de su vasto imperio a mediados del siglo XX, el Reino Unido buscó mantener su influencia y ascendencia en sus antiguas colonias, así como en el resto del mundo, por vías distintas al poderío militar y económico, de los cuales ya no disponía. Así recurrió a un arsenal más sutil, en el cual incluye a la corona, cuya pompa y boato despiertan interés alrededor del globo, pero también a la difusión del inglés, a través del British Council; y por supuesto a los contenidos producidos por la BBC. Sin embargo, el rosario de rectores que desde hace más de una década viene sufriendo la British Broadcasting Corporation amenazan con restarle eficacia a esta última arma.

El pasado viernes la dirección de la emblemática radio y televisión británica, que este mes llega a sus 100 años, anunció una nueva ola de despidos, la segunda en la que va del año. En esta ocasión los rectores de personal afectan al llamado World Service (servicio mundial, en español), el área que se encarga de la difusión de noticias a escala planetaria y que tiene una audiencia cercana a 400 millones de personas semanalmente.

«Recortes en el British Council, recortes en el servicio mundial de la BBC, recortes en la ayuda al desarrollo: el Reino Unido está erosionando su poder blando de todas las formas posibles», advirtió Ian Bond, director de Política Exterior del Centro para la Reforma de Europa.

En similares términos se pronunció el diputado laborista Bambos Charalambous, quien calificó de «indignante» la decisión y afirmó que este no era el momento de que el país redujera la efectividad de sus mecanismos para persuadir o influir sobre otros estados, en particular los del Medio Oriente. «La BBC va a poner fin a sus emisiones en persa, mientras en Irán se llevan a cabo protestas en todo el país (por los abusos contra las mujeres)», agregó el legislador, a través de Twitter.

 Las víctimas

De acuerdo a lo informado por Liliane Landor, directora del World Service, 382 trabajadores, muchos de ellos periodistas, perderán sus puestos en los próximos seis meses, cuando la corporación pública pondrá fin a las emisiones por radio en idioma chino, persa y árabe, estas dos últimas con más de 80 años en el aire. La misma suerte correrán los telediarios en somalí, urdu y gujarati. Asimismo, los servicios en tailandés, coreano y bengalí serán mudados desde Londres a Bangkok, Seúl y Daca, respectivamente.

Con estas medidas la dirección de la BBC espera ahorrar 28,5 millones de libras (32 millones de euros) dentro de un plan para reducir en 500 millones de libras (560 millones de euros) su presupuesto y así enfrentar la inflación y la decisión del anterior Gobierno de Boris Johnson de congelar por dos años la TV licence, la tasa que los británicos que tienen un televisor en casa deben pagar y la cual se emplea íntegramente para financiar a la cadena.

 Doce años de recortes

El servicio mundial de noticias de la BBC tradicionalmente era financiado por el Gobierno, pues era visto una herramienta de «poder blando». Sin embargo, esto comenzó a cambiar en el año 2010 cuando el entonces ministro de Economía, George Osborne, decidió que buena parte del coste de esta unidad de la emblemática corporación de radio y televisión pública fuera sufragada también con las tasas que pagan los contribuyentes.

Este mismo año, la BBC debió solicitar al Ministerio de Exteriores 4 millones de libras (4,5 millones de euros) de emergencia para poder cubrir la invasión rusa a Ucrania. Hasta el momento el nuevo Ejecutivo encabezado por Liz Truss no se ha pronunciado sobre el asunto.