Afirman que el heredero al trono británico mantuvo una cena romántica en San Valentín con su antigua amante Rose Hanbury, con quien ya se lo relacionó en el 2019
19 feb 2023 . Actualizado a las 10:01 h.Los rumores de una supuesta infidelidad del príncipe Guillermo de Inglaterra hacia su esposa, Catalina, han vuelto cobrar fuerza después de la publicación de nuevas informaciones en algunos medios británicos. Afirman algunos que el príncipe de Gales ha pasado el día de San Valentín con Rose Hanbury, la noble con la cual ya se lo relacionó en el año 2019 y que fue en el pasado amiga de su mujer.
De acuerdo con las informaciones recogidas por algunos medios, Guillermo y Rose Hanbury mantuvieron una cena romántica en un día tan simbólico como el 14 de febrero, lo que alimenta de nuevo los comentarios acerca de una posible crisis en un matrimonio que siempre había ofrecido una imagen de pareja perfecta. La prensa ha rescatado ahora unas declaraciones que hizo Catalina hace unos días durante una visita a un mercado de Leeds cuando un florista local le entregó un ramo de jacintos y le comentó: «Supongo que Guillermo le regalará rosas en San Valentín», un comentario al que ella respondió negativamente: «No creo que lo haga».
En medio de los rumores, los príncipes de Gales acudirán en la noche de este domingo a la ceremonia de entrega de los premios Bafta en medio de una gran expectación.
Fue en abril del año 2019 cuando salió por primera vez a la luz la supuesta infidelidad del príncipe Guillermo a Kate Middleton. Hasta entonces, tanto él como su hermano Enrique habían representado para el mundo la imagen de la unión y la armonía, cada uno con su propia familia pero juntos en el mismo proyecto. Una fractura como la provocada por la marcha del príncipe Harry y Meghan Markle de la familia real era un supuesto inimaginable.
Pero en la primavera del 2019 todo eso saltó por los aires cuando algo pareció romperse en el matrimonio aparentemente idílico de los entonces duques de Cambridge. Unas comprometedoras imágenes de Guillermo en actitud muy cercana y cariñosa con Rose Hanbury, desataron rumores en todo el país y una profunda crisis en la pareja. Habían sido tomadas en un club nocturno y en ellas podía apreciarse cómo el primogénito de Diana de Gales agarraba por la cintura a la hasta entonces amiga de su mujer.
La supuesta infidelidad a la que apuntaban aquellas imágenes habría tenido lugar poco más de un año antes, durante el tercer embarazo de Kate Middleton, fruto del cual nacería el príncipe Luis.
Rose Hanbury, que estuvo casada con David Rocksavage y fue durante su matrimonio marquesa de Cholmondeley, mantenía una estrecha relación con la duquesa de Cambridge por los vínculos de ambas con la tranquila y lujosa localidad de Norfolk, donde el nieto de Isabel II tiene su casa de vacaciones de Anmer Hall. A partir de aquellos rumores, la relación entre ambas amigas se distanció y Kate Middleton se encargó de vetarla para que ella no volviera a aparecer a su lado en ninguna recepción o acto público.
Sorprendentemente, dos meses después de aquel escándalo, Hanbury había sido la invitada inesperada en la cena que la reina Isabel II dio en el palacio de Buckingham en honor de Donald Trump y Melania con motivo de su visita al Reino Unido. La familia real inglesa lució sus mejores galas para homenajear a los Trump en un evento que contó además que numerosos invitados de la política y la alta sociedad londinense. No trascendió en aquel momento si Rose y Kate se cruzaron o hablaron durante aquella velada, porque no hubo una imagen pública del supuesto encuentro.
La figura del príncipe Guillermo vuelve a acaparar de este modo titulares negativos después del varapalo que supuso para él la publicación de las memorias de su hermano, tituladas en español En la sombra. El príncipe Enrique reveló en ellas distintos asuntos espinosos relacionados con su familia, entre ellos, el hecho deque el heredero al trono lo agredió físicamente durante una discusión de los hermanos relacionada con Meghan Markle.