Amputada de pies y manos con 25 años en Valencia: «Le dijeron a mis padres que se despidieran»

Iago García
I. GARCÍA LA VOZ

SOCIEDAD

Carla, joven valenciana de 25 años que ha sobrevivido a una grave infección bacteriana pero ha tenido que ser amputada de manos y pies
Carla, joven valenciana de 25 años que ha sobrevivido a una grave infección bacteriana pero ha tenido que ser amputada de manos y pies ANTENA3

Carla se vio afectada por una bacteria que acabó extendiéndose por su cuerpo. Todo empezó tras someterse a una intervención en el hospital, pero acabó en la uci y con coma inducido. Cuando despertó, no tenía ya sus extremidades

15 jun 2024 . Actualizado a las 18:14 h.

La vida de Carla ha dado un giro de 180 grados. Pero sigue siendo vida porque, afortunadamente, y pese al difícil accidente de salud que ha sufrido, sigue en este mundo. Esta joven valenciana de 25 años llevaba una vida normal hasta que un día tuvo que ingresar en el hospital para someterse a una intervención que, en teoría, no revestía complicaciones. Los médicos tenían que quitarle un bulto en la ingle. Sin embargo, pasados unos días tras recibir el alta, empezó a vomitar y a tener diarrea. En un principio parecía que el caso no era grave.

Pero cuanto más tiempo pasaba, peor se encontraba Carla. Así que finalmente le dieron un diagnóstico poco halagüeño: una bacteria se había extendido por todo su cuerpo. La situación se tornó en muy grave, hasta el punto de que en el hospital fue derivada a la uci y le indujeron el coma. De esta historia se ha hecho eco el programa Y ahora Sonsoles, presentado por la hija del conocido periodista lucense de Pol, Fernando Ónega. 

Tal y como relató la joven en el programa vespertino de Antena3, la infección bacteriana le ha supuesto un grave problema. Sufrió una sucesión de paradas cardiorrespiratorias que agravaron aún más su estado de salud e incluso un fallo multiorgánico que llevó al equipo médico a decirle a sus padres «que pasaran a despedirse de mí, porque yo no salía de ahí». Superó el trance, despertó del coma a los 12 días, pero no sin consecuencias en su cuerpo. Le habían tenido que amputar por la agresividad de la bacteria sus extremidades. «Llegué el lunes a casa sin mis manos ni mis pies», detallaba sobre su situación a Sonsoles Ónega en directo. En su relato ante las cámaras, en todo caso, también quiso trasladar un mensaje de optimismo: «Quiero que esto se vea porque es un problema que cada día sucede más. Antes la gente se moría y ahora un 5 % de la población sobrevivimos».    

Los riesgos de las infecciones bacterianas

Este tipo de infecciones pueden llegar a ser graves y, además, a extenderse con rapidez en el organismo. Algunas llegan a causar la muerte de nuestros tejidos mediante la temida necrosis. En los casos más raros y extremos como el de Carla, habría incluso gangrena gaseosa, llegando a destruír con celeridad masa muscular y provocar amputaciones para salvar la vida de los pacientes.

En ciertos casos puede padecerse sepsis, un inflamación en nuestro cuerpo que daña tanto órganos como tejidos. También si esto ocurre y para evitar que siga propagándose pueden producirse amputaciones de extremidades. 

Los riesgos se reducen manteniendo una buena higiene, especialmente en el caso de cortes y heridas. Deben seguirse las indicaciones de los médicos al respecto y, en caso de tener sospechas, acudir rápidamente a un centro sanitario por la virulencia con la que bacterias como la staphylococcus aureus o clostridium perfringens pueden afectarnos.