Muere a los 28 años el investigador Sammy Basso, la persona con progeria más longeva del mundo
SOCIEDAD

Sufría un envejecimiento relámpago que afecta a un individuo de cada 20 millones
07 oct 2024 . Actualizado a las 09:31 h.El italiano Sammy Basso, la persona con progeria más longeva del mundo, ha muerto a los 28 años, según ha informado este domingo la asociación que el mismo creó para concienciar sobre esta dolencia. «Hoy nuestra luz, nuestro guía, se ha apagado. Gracias, Sammy, por habernos hecho partícipes de esta vida maravillosa», recoge el comunicado.
Basso, que se hizo científico para investigar sobre el envejecimiento relámpago, buscaba una cura para la progeria de Hutchinson-Gilford, una enfermedad genética extremadamente rara que no tiene cura y que solo padecen uno de cada 20 millones de personas.
Basso, que nació en Schio, al norte de Italia en 1995, conoció de niño a uno de los principales expertos del mundo en envejecimiento, el asturiano Carlos López Otín, y decidió seguir sus pasos para investigar su propia enfermedad. A los 23 años se licenció en Biología en la Universidad de Padua y poco después publicó junto al equipo de López Otín los resultados de un tratamiento experimental que logró aumentar un 25% la longevidad de ratones afectados por el síndrome. «No sé si me ayudará a mí, pero por primera vez puedo creer que, en el futuro, los niños con progeria podrán vivir una vida normal», dijo Basso, que, pese a los malos augurios desde su primer diagnóstico con solo dos años de edad se ha convertido en la persona con progeria más longeva del mundo.
En todo este tiempo, Basso ha dado visibilidad a la progeria, un síndrome extremadamente raro que provoca un envejecimiento relámpago. Basso falleció el sábado por la noche de forma repentina mientras cenaba en un restaurante de Treviso (Italia), pocos días después de volver de un viaje a China.
Su compromiso con la progeria le llevó a protagonizar un documental de National Geographic. Basso también fue nombrado Caballero de la Orden del Mérito por el entonces presidente de la República italiana, Sergio Mattarella. Ante su fallecimiento, la actual presidenta, Giorgia Meloni, ha dicho de Basso que fue «un extraordinario ejemplo de valentía, fe y positivismo. Enfrentó cada desafío con una sonrisa, demostrando que la fortaleza puede superar cualquier obstáculo».