Sara Carbonero revela el suplemento gallego que tomó durante su cáncer: «Fue un cambio brutal»
SOCIEDAD
La periodista participó en un evento de la compañía Hifas da Terra, que investiga las propiedades medicinales de los hongos, y a cuyos productos fue fiel durante su tratamiento oncológico. «Mi sistema inmune empezó a subir de una manera que mi propio médico me preguntó qué estaba haciendo»
05 dic 2024 . Actualizado a las 17:36 h.El discurso que dio el pasado mes de octubre hablando por primera de vez de su enfermedad, emocionó e inspiró a partes iguales. «Esta es la primera vez que hablo a corazón abierto y públicamente sobre mi enfermedad: el cáncer», decía en la gala benéfica de Elle.
Sara Carbonero ha vuelto a explicar el proceso que vivió desde que le diagnosticaron un tumor maligno en el ovario en el año 2019. Lo hizo este miércoles estableciendo una conexión con Galicia. Y es que la periodista fue la presentadora de un evento muy especial para ella que se celebró en Madrid: el 25 aniversario de la empresa Hifas da Terra. La que fuese una spin off de la Universidade de Santiago estudia las propiedades medicinales de los hongos. La informadora e influencer usó los tratamientos y suplementos de esta compañía pontevedresa.
«La enfermedad me acercó a Hifas. En mi caso personal noté un cambio brutal en las defensas porque de repente mi sistema inmune empezó a subir de una manera que mi propio médico me preguntó qué estaba haciendo porque no era lo lógico», relató.
Hifas da Terra ha participado en más de 30 proyectos de I+D+i en el ámbito de la salud colaborando con centros de investigación, hospitales y universidades para validar las aplicaciones de los hongos. «Me emocionaba porque estaba pasando una época regular y me ayudó muchísimo, se me quedó una frase además que era como "¿sabes que los hongos son capaces de enfermarse, se enferman y se curan ellos mismos?" Con eso tiré para adelante, sigo con él y me está yendo muy bien. Son pequeños milagros de la naturaleza capaces de transformar nuestra salud y nuestro bienestar», prosiguió.
La compañía gallega ha puesto en marcha ensayos clínicos para testar la efectividad de sus productos en la mejora de los marcadores inmunológicos y en la calidad de vida de pacientes de diferentes cánceres. Como explicaban hace un año a La Voz de Galicia, no se trata de un tratamiento contra el cáncer sino de un coadyuvante de la terapia contra estos tumores. «La salud es nuestra base, nuestro motor», añadió.
Una etapa complicada
Sara Carbonero fue operada de un tumor maligno en el ovario en dos ocasiones, en el 2019 y en el 2022. Durante los procesos de quimioterapia se apoyó en un psicooncólogo y en suplementos como el de la compañía gallega. Un detalle en el que quiso insistir mucho. «Hay que tener mucho cuidado porque estamos hablando de medicina».
«Tuve la suerte de que, en mi caso, mi médico sí lo vio compatible», sentenció
De esa difícil etapa de su vida, también tuvo un recuerdo para el padre de sus hijos, el exportero Iker Casillas, de quien se separó en el 2021, pero con quien mantiene una muy buena relación. Ambos coincidieron en el tiempo con graves problemas de salud, cuando el futbolista jugaba en el Oporto en el 2019 y aún eran pareja.
«Tenía otra situación cercana que tenía que ver con el corazón, y Cata (fundadora de Hifas da Terra) no tenía por qué volcarse tanto conmigo. Por desgracia en estos últimos cinco años le he dado bastante la lata con muchas cosas y siempre, siempre, ha estado ahí», sentenció.
El relato más duro
Aunque Sara Carbonero no ocultó que estaba pasando por un duro tratamiento, nunca había hablado tan claro de su enfermedad como el pasado mes de octubre. Muy emocionada, recogía un premio en la cuarta edición de la gala benéfica de la revista Elle, en apoyo a la lucha contra el cáncer. «Me ha costado tiempo aceptar, comprender, que esto es una carrera de fondo, que yo voy a ser siempre una paciente oncológica, toda mi vida, y conviviré con la incertidumbre, incluso he aprendido a abrazarla», explicaba.
«Estoy aquí para lanzar un mensaje de esperanza, de aliento para todas las personas que estén conviviendo porque no me gustan nada los términos bélicos, lo siento mucho... batallar y así, pero aceptando esta cruel enfermedad. Os voy a contar una cosa: cuando en el 2019 me encontré con el diagnóstico del cáncer, lógicamente me quedé en shock. Era terrible, yo tenía 35 años, una vida sana, no entendía nada. Y eso que mi pronóstico fue bueno, pero mi cabeza estaba llena de porqués. Y, ¿por qué? Porqué todo el rato. Entonces me recomendaron ir a un psicólogo, ir a un psicooncólogo, que hacen una labor maravillosa, pero yo en ese momento necesitaba era hablar con mujeres que hubieran pasado lo mismo que yo».