Álvaro Iraizoz, abogado de familia: «La Ley de Eficiencia Procesal ha puesto una traba en el acceso a la justicia»

Adrián García Seoane REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

El abogado y secretario de la Asociación Española de Abogados de Familia Álvaro Iraizoz en un congreso.
El abogado y secretario de la Asociación Española de Abogados de Familia Álvaro Iraizoz en un congreso.

El secretario de la Asociación Española de Abogados de Familia considera que la nueva norma, que obliga a mediar a las partes antes de presentar una demanda de divorcio, podría llegar a ser inconstitucional

01 jun 2025 . Actualizado a las 21:37 h.

La nueva Ley de Eficiencia Procesal ha causado revuelo entre muchos abogados de familia. El letrado y secretario de la Asociación Española de Abogados de Familia (Aeafa) Álvaro Iraizoz (Pamplona, 1980) considera que la norma ralentizará aún más los procesos contenciosos de divorcio y que, incluso, podría llegar a ser inconstitucional.

—Como asociación, ¿cómo valoran la nueva ley?

—Esta ley regula los métodos alternativos de resolución de conflictos y nosotros, desde la asociación, estamos totalmente a favor de ellos. De hecho, la abogacía de familia ya los venía desarrollando, y la gran mayoría de los asuntos ya se resolvían por las vías del mutuo acuerdo. Pero hacemos una valoración muy crítica de la ley, sobre todo del requisito de procedibilidad [condición necesaria para que pueda comenzar a tramitarse un procedimiento judicial]. Además, la ley se tiene que interpretar, porque no es clara. La mayoría de jueces y secretarios judiciales están interpretando que ese requisito de procedibilidad, esa negociación previa obligatoria, también se tiene que aplicar a procedimientos con menores. Ahí nosotros no estamos de acuerdo.

—¿Cree que la ley puede ralentizar los procesos de divorcio?

—Nosotros dijimos que la ley iba a suponer una mayor dilación en la tramitación de los procesos, porque se impone una fase obligatoria de uno a tres meses de duración que además implica un mayor coste. Nosotros ya nos quejábamos de que en los procedimientos de familia con hijos menores había grandes dilaciones. Esto lo único que hace es ahondar en el problema. Y hay una serie de procesos, que pueden ser en torno al 20 % del total, que son de alta conflictividad. En estos casos con menores, exigir esa negociación previa obligatoria es un auténtico problema. La ley no ha contemplado estos casos, que no son mayoritarios pero que tampoco son pocos.

—¿Qué haría falta para que las demandas se agilizasen?

—Pues lo que venimos reivindicando desde la asociación desde hace lustros: más medios en los juzgados de familia, porque faltan medios materiales y personales. En vez de invertir en la administración de justicia, ahora se ha creado un mecanismo para que las partes arreglen sus conflictos fuera de los juzgados. Está bien que la gente arregle sus problemas por sí misma, pero hay asuntos en los que no es posible. Creo que en esta ley hay una posible inconstitucionalidad, porque se puede considerar que se ha puesto una traba en el acceso a la justicia. Y luego también hay una privatización de la misma, porque le estás diciendo a la gente que solucione sus problemas legales por otros medios.

«Hay bastante inseguridad jurídica»

Otro de los aspectos de esta ley que Iraizoz considera problemático son las trabas burocráticas para demostrar que se ha intentado la medicación previa.

—¿Cómo se acredita que se ha intentado mediar previamente?

—Hay varios métodos. Está el burofax de toda la vida, el correo electrónico certificado, el burofax online e incluso el buroSMS. Pero hay juzgados que ya te dicen que ciertas cosas no las van a admitir. Algunos no admiten un correo electrónico normal, un wasap o una llamada grabada como prueba de que ese intento de mediación se ha producido. La ley no dice nada sobre qué medios debemos utilizar los abogados y, por tanto, también aquí hay bastante inseguridad jurídica. El burofax con acuse de recibo, por ejemplo, es problemático porque muchas veces lo mandas y la persona no está en casa, por lo que no se lo pueden entregar. Le dejan un aviso para recogerlo en la oficina de correos y no lo hace. Entonces hay que pensar si ya se puede interponer la demanda. Algunos juzgados te dicen que sí, otros que no, y otros que tienes que intentarlo una vez más y con otro medio.

—¿Ha notado un descenso en las demandas de divorcio?

—Para mí hay un cerrojazo total desde el 3 de abril [día en que entró en vigor la ley]. A partir de esa fecha apenas hay demandas nuevas, porque con los requisitos que establece la ley es imposible que entren. Pero dentro de nada, cuando ya hayan pasado los plazos que marca la ley para el proceso negociador y en caso de que no haya acuerdo, podremos interponer demandas en el interés de nuestros clientes.