Julio Iglesias anima la venta de viviendas en la parroquia gallega en la que compró una mansión

SOCIEDAD

El cantante no ha visitado aún la finca adquirida en el municipio de Piñor, donde durante este verano se han realizado varias obras.
12 sep 2025 . Actualizado a las 13:30 h.Desde que a principios de junio se desveló que Julio Iglesias había comprado una propiedad en el pequeño pueblo de Vilariño, en el concello de Piñor, la visita del cantante internacional ha sido motivo de especulaciones e incluso bromas entre los habitantes de este municipio ourensano de 1.119 habitantes. El propio Iglesias confirmó a la revista ¡Hola! tanto la adquisición de la mansión —que le vendió el exalcalde de Ourense Manuel Cabezas, anterior propietario junto a mujer Ada Arroyo— como su deseo de regresar a la que, como decía en la canción Un canto a Galicia, es la tierra de su padre. Aunque realmente el doctor Iglesias Puga era natural de A Peroxa, un municipio que está a unos 30 kilómetros de la finca adquirida ahora por su hijo más famoso.
El caso es que el verano toca ya a su fin y, tal y como confirmaban a este medio a través del telefonillo ubicado a la entrada de la propiedad, «el señor Iglesias no ha venido». «Esperamos que venga pronto», añadía como deseo el guardés que atendía la llamada, aunque aseguraba desconocer si esa visita se producirá antes de que finalice el año.
Julio Iglesias tiene propiedades en Miami, República Dominicana y Las Bahamas, pero también en la localidad malagueña de Ojén, cerca de Marbella. En concreto esta última residencia fue destino durante años de las vacaciones con sus hijos pequeños y su esposa Miranda Rijnsburger. A ella se la vio también este verano en esa casa de la Costa del Sol, lo que hizo surgir esperanzas de que la familia se animase a visitar la recién adquirida en territorio ourensano.
«Nós estaríamos encantados de que viñera», apuntaba el alcalde del municipio, José Luis González, que agradece que la decisión del cantante haya servido para dar visibilidad al pueblo. Cuenta que solo la noticia de la compra ya ha servido para dinamizar el concello. «Non sei si é coincidencia, pero lévanse vendido bastantes casas, incluso na mesma parroquia ca súa, a da Canda, a xente de Madrid ou de Mallorca. E pasaron moitos que viñan de A Coruña e doutros sitios, preguntando onde comprara a casa Julio Iglesias», relata.
Pero el único trasiego del que dan cuenta los escasos residentes del entorno no es de coches de alta gama ni de helicópteros que pudieran descender sobre la finca rodeada de jardines, arbolado y en la que hay hasta un pequeño estanque. Los vehículos más habituales fueron los de los operarios que han estado trabajando en su interior. «Estiveron todo o verán en obras. O que se di por aquí é que arranxaron a piscina e tamén os xardíns», comenta un vecino que reconoce que es difícil saber cuántos de los rumores que circulan son o no reales. El muro de piedra de tres metros de altura que circunda toda la propiedad y los árboles de gran envergadura que la limitan impiden ver la finca desde ningún lugar del entorno.