El incombustible David Simón

TORRE DE MARATHÓN

MARCOS MIGUEZ

El lateral canario es el único jugador de campo que ha disputado todos los minutos en el Dépor

10 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El Deportivo presume de motor canario. A tope de revoluciones en el exigente rol que el sistema del rombo reserva para los laterales, David Simón (Las Palmas, 1988) se revela como el único jugador de campo que Natxo González ha mantenido en juego todos los minutos. Su buen rendimiento, el crecimiento experimentado en defensa desde las dudas del estreno liguero y las constantes subidas al ataque han apoyado a un jugador que no ha temblado frente a los dos competidores con que cuenta por el puesto: Bóveda y Valentín.

Hay comparaciones peligrosas, de las que es difícil que se salga bien parado. Quizá eso mismo pensó Simón cuando el Deportivo de Manuel Pablo le abrió las puertas. Desde luego, las virtudes de ambos poco tienen que ver. El eterno lateral blanquiazul presumía de cerrar a cal y canto una banda por la que corrieron jugadores tan verticales como Makaay o Víctor, pero que nunca se convertía en autopista para los adversarios. Simón es un jugador distinto al actual segundo entrenador del Fabril, aunque coincide en orígenes con su antecesor, a quien ha reconocido como referente en su carrera. Serio y sacrificado, están cortados por el mismo patrón, aunque el dorsal 2 de este Dépor parece a la medida de Natxo González, quien ha visto en él a un futbolista que le da presencia constante en ataque, al tiempo que marida bien con el juego de pase y dominio que el técnico promulga.

Al ataque

Aunque arranca desde la línea defensiva, la zona más habitual donde seguir a David Simón se adelanta unos metros hasta el mediocampo. Así ocurrió el pasado domingo en el partido de Riazor, donde el veloz futbolista llevó el peso de buena parte de las ofensivas de su equipo, mientras le buscaba las vueltas a Ricca y Ontiveros (luego Pacheco) que, como él, proceden de Primera División.

El carril derecho protagonizó buena parte de las energías deportivistas, como en aquella jugada en los instantes iniciales en las que el lateral se incorporó al ataque y remontó la línea de fondo hasta prácticamente el área pequeña, pero Quique remató fuera su centro atrás. Si hubiera acabado en gol, la fenomenal acción le hubiera resarcido de aquella jugada amarga de la primera jornada, cuando cometió penalti sobre el lateral del Albacete Fran García en una acción final a la desesperada del cuadro local que no parecía ir a ninguna parte.

Antes del entrenamiento de ayer, el lateral deportivista afirmó que cada día se siente «más cómodo» en el Deportivo, aunque matizó que él mismo todavía dispone de muchísimo margen de mejora, como el resto de la plantilla. Una última afirmación que repitió para referirse a todo el Dépor, que en la clasificación sigue a dos puntos del ascenso directo. «Este equipo todavía no ha tocado techo y queda bastante para que todo el mundo dé el máximo porque creo que tenemos una plantilla con jugadores bastante buenos, así que estamos en el buen camino e incluso creo que se puede mejorar mucho», sostuvo.

«Prefiero ser como somos»

Eso sí, el jugador se declaró comprometido con el proyecto emprendido y un estilo de juego que lleva la iniciativa en todos los partidos que disputa. «Cada equipo tiene su forma de jugar y ya vemos cómo es la Segunda División, que en cualquier balón parado, cualquier jugada o cualquier balón arriba, que es lo que buscan muchos equipos, te pueden hacer gol, pero yo prefiero ser como somos nosotros», dijo. Para esto, el Dépor también necesita sacrificio y esfuerzo como el de David Simón, capaz de destacarse desde la banda como el que más entradas (acciones en pos de robar la posesión) hace de la Liga. Así, ha recuperado nada menos que 35 balones en los ocho partidos jugados. Un dato más que avala a un futbolista completo que se está revelando incombustible.