Natxo González sigue buscando la mejor versión del mundialista danés
12 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Cuando el Deportivo inició la pretemporada había una serie de nombres que Natxo González tenía entre sus preferencias para que se mantuvieran en el plantel. En este sentido, el medio del campo blanquiazul era, a su entender, la zona que mejor cubierta estaba. Estaba claro que Guilherme se iba a ir, pero Pedro Mosquera tardó poco en decir que se quedaba, Edu Expósito era uno fijo para seguir, Álex Bergantiños regresaba, Krohn-Dehli dudaba y Celso Borges, aunque tenía decidida su marcha, se dejó querer durante algunos días. Tanto es así que el técnico vitoriano llegó a ilusionarse con la permanencia del costarricense.
Al final, el tico se marchó y, aunque llegaron Vicente y Didier Moreno, a Natxo le quedó una espina clavada de no poder contar con él. Pero ese sabor amargo se vio aliviado con la confirmación de que Michael Krohn-Dehli hacía una apuesta por el Dépor.
Un futbolista experimentado. De buen pie. Que no genera problemas. Que sin ser alemán, exhibe todas las virtudes de los futbolistas de ese país... Un lujo, pensó el entrenador blanquiazul.
Y no tardó Natxo González en dejar clara su fascinación por el danés. Sin embargo, este no ha conseguido, todavía, ofrecerle una respuesta acorde. Inició la competición con una expulsión impropia de un veterano como él por dirigirse al árbitro diciéndole: «¡Qué malo eres!». Dos partidos de sanción y poco después de reaparecer, una nueva roja, esta vez también sorprendente en un jugador de su experiencia.
Y desde entonces no ha encontrado su sitio. Trabaja bien durante la semana, pero en los partidos no acaba de ofrecer su mejor versión en una Segunda División en la que, por clase, debería ir sobrado.
Algunos problemas físicos también se cruzaron en su camino, con lo que las intermitencias han marcado su participación este año como futbolista blanquiazul.
Así, entre sanciones y lesiones, su aportación al equipo se limita a nueve encuentros de Liga y uno más de la Copa del Rey, totalizando apenas 668 minutos.
La irrupción de Edu Expósito, sin duda, la gran noticia de la temporada en el medio del campo blanquiazul, ha jugado también en su contra en la apuesta del técnico blanquiazul.
Ahora, el danés, que disputó el último Mundial con la selección de su país, parece haber perdido su puesto en un Dépor cuyo medio del campo exige mucho despliegue físico. Pero Krohn tiene en Natxo González un valedor que sigue confiando en que su profesionalidad dará este año importantes tardes de fútbol en Riazor.
