Los factores diferenciales de Borja Jiménez en el Deportivo

TORRE DE MARATHÓN

Trilli, en un lance del partido contra el Talavera
Trilli, en un lance del partido contra el Talavera CESAR QUIAN

Como Soriano y Trilli contra el Talavera, el técnico deportivista salpica los onces con jugadores con menos minutos que refuerzan competitivamente a la plantilla

13 ene 2022 . Actualizado a las 10:11 h.

El dominio con mano de hierro que el Deportivo está ejerciendo en la Primera RFEF no responde únicamente al talento de nueve o diez jugadores que repiten en las alineaciones semana tras semana. En esta guardia pretoriana de Borja Jiménez, conocida por todos y de la que forman parte Mackay, Víctor García, Lapeña, Jaime, Héctor, Álex, Villares, Juergen, William, Miku y Quiles, se integran de forma habitual otros cuatro o cinco futbolistas que, como el pasado domingo Soriano o Trilli, pocos daban por seguros en la alineación de partida, pero acaban convirtiéndose en claves para inclinar el partido. Fueron el conejo en la chistera del plan del técnico abulense para el último partido, pero constituyen especialmente el refuerzo competitivo de una plantilla en la que todos se sienten protagonistas de la temporada. Su buen partido demuestra que la gestión de grupo funciona en el vestuario blanquiazul.

Trilli y Soriano han sido los últimos ejemplos de un aspecto clave en la consecución del objetivo deportivista, pues a nadie se le escapa que el éxito final no dependerá únicamente del rendimiento de once futbolistas. Aunque el canterano había cubierto la baja de Víctor García contra el Valladolid Promesas, y ambos habían jugado los partidos de Copa de diciembre, es tan cierto en uno como en el otro que llevaban un largo período en el banquillo.

El joven futbolista cedido por el Atlético de Madrid no aparecía en un once liguero desde el empate en casa contra la SD Logroñés del pasado 1 de octubre. Pero su trabajo en la mediapunta, con Juergen retrasado al mediocentro, y, tras la entrada de Álex Bergantiños, en la banda resultó clave para la victoria contra el Talavera. Hasta dejó para las videotecas una jugada individual, pegado a la línea de fondo, en la que estuvo a punto de marcar el gol de la temporada.

Rendimientos y contrato

Por su parte, el juvenil, con únicamente cinco partidos jugados en la temporada, abre en el lateral derecho una formidable competencia con Víctor García de la que ya ha comenzado a beneficiarse el equipo, que en esta jornada ha pegado el estirón hasta los seis puntos de ventaja respecto al Racing de Santander. En su caso, al rendimiento en los entrenamientos y los partidos habrá de añadir la situación contractual de ambos: con el valenciano cedido hasta el 30 de junio y el canterano renovado el pasado verano hasta el 2024.

Otros ejemplos de factores diferenciales al margen del equipo titular son los de Noel, De Vicente y Doncel. El delantero acabó el 2021 a lo grande, con tres titularidades consecutivas contra el Valladolid Promesas y la Cultural, así como el Osasuna en la Copa. Borja Jiménez dio entrada al juvenil a costa de Villares, y sus cualidades fueron clave para ese exigente ida y vuelta al que el técnico sometió a los rivales, mientras prolongaba hasta las once actuales las jornadas sin perder del Deportivo. En plena negociación para su continuidad, no ha dejado de entrar en ningún partido de su equipo desde el pasado 21 de noviembre, sea en el once o a lo largo del encuentro.

Algo parecido le había ocurrido a Doncel, que encadenó titularidades contra el Zamora (William se quedó en el banquillo), la UD Logroñés (Quiles fue suplente) y el Rayo Majadahonda (dejó fuera a William de nuevo), y volvió luego a reclamar protagonismo con un golazo de falta contra el Osasuna que le valió para entrar como suplente contra la Cultural Leonesa. Tras un noviembre sin apenas participación, el rendimiento de su compañero De Vicente resultó clave para eliminar al UCAM en la Copa, y desde ahí no había vuelto a perderse un compromiso de su equipo, aunque no entró al del pasado domingo.

La llegada de Álvaro Rey como refuerzo del mercado invernal insiste en esa política de fomentar la competencia a costa de no contar con una alineación única, sino un sinfín de variantes sostenidas por un núcleo de jugadores invariable y, al menos, seis recambios dispuestos a entrar en cualquier momento.