El Deportivo ya tiene banquillo

Pedro José Barreiros Pereira
pedro barreiros A CORUÑA

TORRE DE MARATHÓN

César Quian

Los suplentes de la semifinal contra el Castellón suman casi 5.000 minutos más de juego que los que cayeron en la final de la pasada temporada

10 jun 2023 . Actualizado a las 19:59 h.

Hay circunstancias capaces de llevar a tomar decisiones incomprensibles a la vista de un profano, como que el pasado domingo Rubén de la Barrera solo hiciese tres cambios, incluido uno apenas a cuatro minutos del final. Pero también están los datos. Y estos sostienen que el Deportivo disputa la fase de ascenso con un elenco de suplentes muy distinto al de la pasada temporada. El banquillo de la semifinal del pasado domingo en Riazor casi duplica en minutos al de la final de la temporada anterior contra el Albacete. En aquella ocasión, entre los once jugadores que se sentaron junto a Borja Jiménez, solo William de Camargo alcanzaba los 2.000 minutos de juego. Sin embargo, contra el Castellón Lapeña, Olabe y Rubén Díez, que siguieron el choque al lado de Rubén de la Barrera, superaban esta cifra, aunque ninguno acabase saltando al campo.

El cambio de rumbo marcado por el tercer entrenador blanquiazul de la temporada ha llevado a ingresar en la alineación de la ida de semifinales por el ascenso a jugadores de la casa, como Álex Bergantiños y Yeremay (ahora por delante de Olabe y Rubén Díez, este por el traslado de Soriano desde la izquierda a la mediapunta), junto a otros cuya participación ha pasado por claroscuros a lo largo de la campaña, como Jaime, Lebedenko y Svensson. De la Barrera prefirió a los dos primeros por delante de Lapeña y Raúl Carnero, que figuran entre los once futbolistas más utilizados hasta ahora en el Deportivo, mientras la lesión de Quiles, que cerraba el mes de abril como el jugador de campo con más minutos, ha abierto las puertas del once al joven delantero del Espanyol.

Más allá del criterio del nuevo técnico, en el ánimo de todos subyace reactivar de arriba abajo a la plantilla. Y, de paso, no tropezar en la misma piedra de la temporada pasada, que acabó penalizando al Deportivo en la crucial final por el ascenso. Por aquel entonces, Borja Jiménez estableció una gestión de plantilla que basaba su éxito en un grupo cerrado de jugadores, y el ostracismo al que relegó a todos los demás con que no contaba. El por aquel entonces técnico del Deportivo llegó a defender públicamente como normal que para los tramos finales de campeonato en una plantilla de 22 «no vas a tener a los 22 jugadores activos. Eso no existe, es engañarse». «En enero o febrero cinco o seis jugadores deciden agachar los brazos. Pero no aquí en el Dépor. Podéis ir a la plantilla de cualquier equipo de esta categoría», afirmó sin rodeos en rueda de prensa el 8 de abril del 2022.

A once puntos del liderato, ya por entonces estaba claro que el Deportivo iba a verse abocado a los partidos de play off para buscar el retorno a la élite. Poco más de dos meses después, en el encuentro definitivo, ante un Riazor abarrotado y frente al Albacete entrenado precisamente por Rubén de la Barrera, Jiménez se vio obligado a llamar a filas a varios de los jugadores a los que menos minutos había concedido a lo largo del curso.

Pese al fenomenal ambiente favorable, y que para subir de categoría al equipo coruñés le bastaba con el empate al final de la prórroga, el Dépor se acabó estrellando. Los blanquiazules se adelantaron en el marcador por medio de Mario Soriano, pero con el paso de los minutos su juego fue decayendo. Varios de los futbolistas principales, como Juergen, Quiles o el propio Soriano tuvieron que ser sustituidos a lo largo de la segunda parte. A ocho minutos de que se cumpliese el 90, el adversario empató y forzó la prórroga. Durante el tiempo extra siguió el carrusel de cambios en las filas locales, con Jaime, Villares y Héctor Hernández camino de los vestuarios.

A siete minutos del final, el Albacete remontó frente a un Deportivo formado por algunos de los que menos participación habían disfrutado en todo aquel curso. De Vicente (657 minutos), William (2.036), Álvaro Rey (369), Granero (940), Aguirre (868) y Noel (917) acabaron accediendo al campo para afrontar los minutos más decisivos de la temporada en pos del objetivo... con el resultado ya conocido.

Un año después, el Dépor aún está pendiente de jugar el partido de vuelta de semifinales contra el Castellón y, por tanto, todavía no sabe si se clasificará para una nueva final por el ascenso, pero el problema de su banquillo está paliado, pues solo cinco de sus futbolistas actuales cuentan con menos de mil minutos de juego: Kuki Zalazar, Saverio, Trilli, Arturo y Mella. El Deportivo ya tiene banquillo, pero le queda por transitar el camino hacia el ascenso.