Afranio regresa a Tomiño de la mano de Víctor Coyote

Soledad Antón soledad.anton@lavoz.es

VIGO

26 nov 2008 . Actualizado a las 11:22 h.

La peripecia vital de este hombre, convertido por obra y gracia de la Guerra Civil (poca gracia, dicho sea de paso) en o siñor Afranio, es lo que recoge la cinta que acaba de rodar Víctor Coyote, y que se estrenará el próximo domingo en el auditorio de Goián (19.30 horas).

Me cuenta Víctor que cuando hace casi un año le propusieron realizar el documental dijo que sí al momento. Lo cierto es que jugaba con ventaja, ya que conocía la historia, contada en primera persona por el protagonista en el libro O siñor Afranio. Ou como me rispei das gadoupas da morte. «Lo leí hace tiempo», afirma.

El siguiente paso fue encontrar al actor idóneo para el papel. «Lo tuve claro. Desde el primer momento pensé en Luis Tosar, pero lo descarté convencido de que no podríamos llegar a su caché». Después de unas cuantas pruebas, todas ellas sin resultado, se atrevieron a contactar con Tosar. Para su sorpresa y, sobre todo para su alegría, les dijo que sí. «Está claro que se entusiasmó con el documental, de lo contrario no lo hubiera hecho, porque es ese tipo de proyectos que, económicamente, no compensan a un profesional de su talla», afirma Víctor Coyote.

El documental se grabó en algunos de los escenarios en los que transcurrió la vida de Afranio antes de su exilio definitivo en Argentina, fruto de la Guerra Civil. Entre ellos, claro, Tomiño, donde ejercía de maestro cuando se inició el conflicto, y Portugal, donde adquirió la personalidad de O siñor Afranio, un mendigo, para huir de la persecución franquista.

También recoge el documental una serie de entrevistas con algunas personas que le conocieron bien, entre otros Mario González. Los padres de éste, Isaura y Paco, compartieron peripecias e ideología con Antón Alonso Ríos. Mario tuvo oportunidad de escuchar de boca del protagonista vivencias en primera persona, que son las que ha contado.

La cita, el domingo, en el auditorio de Goián. Teniendo en cuenta lo limitado del aforo y el previsible desborde, se ha previsto un segundo pase a las diez de la noche, con entrada libre.

68 para ser exactos. Son los que han aportado su granito de arena en forma de pintura y escultura a la ONG, que subastará las obras el próximo día 28. El dinero recaudado lo empleará en atender las necesidades (siquiera las más urgentes) de las personas que a diario pasan por su sede de García Barbón, 104.

Entre los artistas que han regalado obras figuran Antón Goyanes, Alfonso Sucasas, Menchu Lamas, Elsa Pérez Vicente, Ana Legido, Fernando y Marieta Quesada, Xulio García Rivas, Fernando Babío, Antón Patiño, Barreiro, Mariola Heredero, Facal, Huete, Berta Cáccamo, Acuña...

Para saber si se está interesado en pujar en o no, nada mejor que darse una vuelta por la exposición, que permanece abierta en el Centro Social Caixanova hasta mañana, y observar las obras con detenimiento. La subasta se celebrará el viernes, a partir de las 19.45 horas, en el Centro Cultural Caixanova. Los precios de salida van desde uno a tres mil euros, lo que implica que hay arte para todos los bolsillos.

Tanto en el de los fumadores activos como en el de los que sufren los humos ajenos. Las personas que estén interesadas en conocer dicho impacto de primera mano no tienen más que acercarse hoy, a partir de las 12 del mediodía, a la Escuela Superior de Ingenieros Industriales.

La idea de realizar cooximetrías, que así se llaman las pruebas que miden el nivel de monóxido de carbono en el pulmón, ha sido del servicio de deportes de la Universidad. Aunque la palabreja se las trae, la técnica es tan sencilla como inspirar y expirar a través de unos aparatos. La jornada incluye una conferencia de María Victoria Aldea, asesora del Programa Gallego de Promoción de la Vida sin Tabaco. Si después de una mañana tan antitabáquica como se prevé, aún se lleva uno la mano a la cajetilla, lo mejor es ponerse en manos de profesionales. Si se quiere dejarlo, claro.