Atados a las encuestas

VIGO

El PSOE diseña sus campañas y listas en base a los sondeos que ultiman, desconfiando en Vigo del posible tirón de Porro

25 abr 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La dirección del PSdeG tiene en la pila de encuestas que acumulan en sus mesas la brújula con la que piensan guiarse para el diseño de la campaña electoral de los comicios municipales del año que viene. Las nominaciones de los candidatos se harán efectivas sobre octubre o noviembre, pero antes todavía quedan bastantes flecos por resolver. Grosso modo, los socialistas mantienen que el poder de las grandes ciudades va a seguir siendo suyo y por ello aseguran no sentirse demasiado amenazados, pese a la desconfianza instalada en su seno a que la crisis económica siga pesando y acabe por desmovilizar a sus afines.

Pero Pachi Vázquez no solo quiere y cree posible mantener el poder de las ciudades, sino que está persuadido de que para su continuidad y posible candidatura a las autonómicas del 2013 le vendría muy bien conservar las diputaciones de A Coruña y Lugo y añadir a esa cuenta la de Pontevedra. Para alcanzar ese objetivo resulta fundamental al PSOE que Abel Caballero logre un incremento de votos importante, y además dejar de ser tercera fuerza en Pontevedra, para tener opciones de optar a la alcaldía, y mantener bastiones como Vilagarcía y Redondela.

Para la primera de las bazas, los socialistas confían en el sentir de sus últimos sondeos que dan al PSOE la posibilidad de reeditar el bipartito en Vigo. Pero aún así no se fían. Temen que a pesar de que el PP está casi desmantelado en la ciudad, Corina Porro empiece a recuperar desde su reelección de ayer parte del tirón que demostró hace tres años cuando se quedó a 2.000 votos de la alcaldía. Para laminar esa posibilidad los de Caballero se han lanzado ya a una campaña de acoso contra la presidenta del puerto inédita hasta ahora. Todo lo que haga la ex alcaldesa en el puerto tendrá la oposición de la alcaldía, y además los palos en las ruedas de la Xunta serán todavía más habituales de aquí en adelante con el objetivo de convencer a la ciudadanía de que Alberto Núñez Feijoo no ha hecho nada por la ciudad en la que está censado desde que preside la Xunta. De ahí las trabas del alcalde a la puesta en marcha del Área Metropolitana, Ciudad de la Justicia, la fusión de las cajas, albergue de indigentes, depuradora, ETEA, estación de autobuses, transporte metropolitano y los reparos y campañas contra el nuevo hospital... Una estrategia centrada en el victimismo, la denuncia y el localismo que constituirá junto a las aceras la base de los de Caballero para la batalla de mayo del 2011.

Respecto a lo de Pontevedra, Pachi Vázquez teje una telaraña en la quiere atrapar al delegado del Gobierno, Antón Louro, para que se vea obligado a convertirse en candidato a la alcaldía pontevedresa. La dirección de los socialistas gallegos quieren plantarle encima de la mesa a Louro los resultados de lo que llaman «democracia demoscópica» y demostrarle que en las encuestas está bien posicionado. El delegado del Gobierno tiene otros planes, incluso volver a Madrid, pero con cargo en plaza y de los altos, si al final Zapatero lleva a cabo la remodelación del Gobierno que le piden varios barones del partido. La misma democracia de los sondeos será vital para resolver el jeroglífico de Vilagarcía. Si los encuestados respaldan a Dolores García, esta podría seguir, aunque no entre ni en sus propios planes. De lo contrario, le tocaría jugar a Modesto Pose, que es la salida que se va a dar en las preguntas demoscópicas. Y todo para conseguir la Diputación, que hace tres años les quedó a 200 votos.