«No es ninguno de estos», dice otro testigo en el juicio a la banda que hizo 5 atracos en un mes
VIGO
Las pruebas de ADN tomadas en un Peugeot 106 robado para atracar un banco en O Rosal incriminan a dos acusados y las de un Mercedes vincula a otro con un asalto en Vigo
05 nov 2014 . Actualizado a las 14:01 h.Otro testigo volvió a exculpar a los cuatro acusados de atracar 5 bancos en un mes en Vigo y su área. «No es ninguno de estos, si les vale de algo», dijo un vecino de As Neves que presenció un asalto al banco Banesto el 23 de octubre del 2012. El testigo así lo declaró en la segunda jornada del juicio en el juzgado de lo penal número 1 de Vigo a una banda que se enfrenta a un total de 140 años de cárcel.
El primer testigo de esta segunda jornada asegura que el hombre que vio salir de un Seat Ibiza y entrar en el banco «era muy alto, de 1,83 metros de estatura, moreno, con entradas y más mayor que los acusados, tendría entre 47 y 52 años». Ninguno de los implicados coincide con esa descripción. Este testigo ingresó hace una semana en la prisión de A Lama y dice no tener una «memoria fresca».
En la vista también declararon agentes que hallaron el Seat Ibiza que usaron los atracadores de As Neves para huir. Tomaron muestras de ADN en el volante y asientos pero sólo correspondían al propietario del vehículo.
ADN incriminatorio
Sin embargo, el análisis de ADN tomado en un Peugeot 106 robado y usado en un atraco en O Rosal corresponden con el dueño del coche y dos acusados. Uno de ellos es José C., al que los testigos apodan el «Rubio». En el volante de un Mercedes usado tras atracar a un vigués salió el perfil genético de Pablo G., otro de los implicados. En un tercer coche, la Guardia Civil encontró el ADN de Mario S. y José C., por un golpe en O Rosal.
Hay una treintena de testigos pendientes de declarar esta mañana, y al menos cinco han pedido protección y declararán detrás de una mampara.
La Fiscalía ha introducido hoy una prueba de última hora pese a las quejas de la defensa. Se trata de un informe sobre las huellas de uno de los robos y que la jueza admitió porque lo considera relevante para el juicio.
Seis meses después de ser detenidos en Oia cuando huían de un atraco en O Rosal, en el que robaron 3.600 euros, la Guardia Civil de Baiona halló 970 euros escondidos detrás del asiento trasero de un coche camuflado en el que trasladaron a Mario S. cuando fue detenido. Los agentes aseguran que fue el único atracador trasladado en ese coche policial en los últimos meses.