
Arancó con un local en 2016 y ahora Nair Rodgríguez Pousa acaba de abrir el cuarto y tiene planes de ampliar su negocio
17 ene 2021 . Actualizado a las 02:06 h.Pintauñas que no han sido usados en experimentos para animales, cremas con certificados veganos y productos libres de componentes tóxicos y especiales para pieles sensibles o tópicas. Esas son algunas de las claves del éxito del negocio emprendedor de Nair Rodríguez. Esta joven viguesa arrancó en 2016 con un primer centro de cosmética, Naïr Natural, cuya filosofía se centraba en el respeto a la naturaleza, los animales y la piel. Y el éxito no ha dejado de acompañarla en toda esta aventura, arranca 2021 con su cuarto centro recién inaugurado y muchos planes de crecimiento.
Todo surgió cuando decidió dar una vuelta a su formación de trabajo social. «Con 32 años decidí empezar de nuevo y formarme en un FP de estética, quería montar algo que usara productos veganos y no fuera elitista, que fuera accesible para todos. Aceleré porque yo misma desarrollé una alergia en las manos mientras trabajaba de prácticas en otro centro. Seguí investigando y me lancé», explica esta empresaria.
Su base son la aparatología no invasiva y los productos naturales, aunque no todos son veganos, ya que existen algunos confeccionados con cera de abejas. Pero sí en su mayoría. Presumen de hecho de ser el único cnetro en Vigo con manicuras veganas: son pinturas orgánicas libres de componentes tóxicos y sin testar con animales.
Entre su carta de servicios hay tratamientos faciales, corporales, diseño de cejas con hena, pedicuras, higiene facial o lifting de pestañas. En total hay ocho personas en plantilla que se reparten en sus centros, que buscan llegar a la gente de todos los barrios: se han instalado en el Calvario, Teis, As Travesas y Coia. Por sus instalaciones pueden llegar a pasar diariamente unas 15 personas en cada local.
Su filosofía de respeto al medio ambiente también llega hasta sus empleadas, todas mujeres, según explica esta viguesa: «Nuestro horario es de lunes a viernes de 10 a 20.00 horas, intentamos cuidar también de nuestras trabajadoras, y si en algún centro se abre el sábado por la mañana, entonces libran el lunes de mañana. Trabajamos muy en equipo, con gente a la que hacemos fija y que cobran por encima de lo que marca el convenio», explica mientras añade que en estos tiempos de coronavirus han mantenido a toda la plantilla e incluso incrementado.
Entre sus servicios también están el maquillaje vegano, con pigmentos naturales, que según explican son aptos incluso para pacientes oncológicas o gente con pieles atópicas o reactivas. Sus masajes son con aceites naturales y apuestan por Galicia comercializando por ejemplo los produtctos Levin Red, fabricaso con vino de la zona de Ribeiro. Existen paquetes para novias veganas, depilación con hilo y todo tipo de tratamientos de belleza, menos depilaciones láser. Y los precios intentan ser competitivos: una higiene facial ronda los 42 euros, una manicura semipermanten los 16 y una sesión de indiba facila los 40.

Como no podía ser de otro modo, en plena ola de éxito esta emprendedora no deja de pensar en nuevas oportunidades. Si la pandemia hizo que aumentase la demanda de los tratamientos relacionados con los ojos, es que puede haber negocio en todas partes. Por ello estudia hacia el futuro llegar también con su filosofía vegana al sector de la peluquería.