Se buscan inversores para Ganomagoga, la empresa puntera en torres eólicas que está a punto de hundirse
VIGO
La Xunta se reúne con los trabajadores y les ofrece un plan de formación similar al del astillero Barreras
15 mar 2023 . Actualizado a las 15:50 h.La situación crítica que atraviesa el Grupo Ganomagoga ha entrado en una nueva fase centrada en la búsqueda de inversores que den «oxígeno» a las fábricas y reconduzcan la deriva antes del cierre definitivo. La Xunta de Galicia, a través del Igape, promueve la exploración de agentes que intervengan en la empresa metalúrgica mediante una inyección de capital o la compra de sociedades para evitar el hundimiento.
Entre los motivos que impulsan esta búsqueda destaca la consideración de Ganomagoga como un grupo estratégico y con dilatada experiencia en la fabricación de torres eólicas, una producción en auge debido a la gran apuesta en energías renovables que promueve Europa. También diseña y exporta la maquinaria que lo produce a grandes clientes. Otra especializaciones del grupo son la fabricación de piezas para los sectores de la automoción y el naval, pero en la última década la producción ha estado centrada en los molinos de viento. Talleres Ganomagoga los fabricada y Aplimega los pintaba. Fuentes del sector metal en Galicia consideran que el grupo con plantas en Ponteareas y Mos, hasta que anunció su posible cierre, tenía futuro.
La Consellería de Industria se ha reunido esta mañana en Santiago de Compostela con el comité de empresa del grupo metalúrgico gallego para analizar más a fondo la situación. La plantilla, compuesta por cerca de 200 trabajadores, ha trasladado la «falta de información» sobre el ERE concursal que ha anunciado la dirección de Ganomagoga para sus cuatro empresas: Talleres Ganomagoga, Cedval, Aplimega y Servicios Metalúrgicos. En estos momentos, dos sociedades han activado ya el expediente de regulación de empleo y en las próximas horas se activarán los restantes.
Entre las medidas planteadas esta mañana en Santiago de Compostela, la Xunta ha ofrecido un plan de formación de los empleados como el que impulsó en su día para la plantilla del extinto astillero vigués Hijos de J. Barreras. Además, el Igape se ha posicionado para dotar a la empresa y a los trabajadores de facilidades para mantener la actividad, pero la fábrica de Ponteareas, la principal del grupo, lleva cerrada una semana.
Todavía no han trascendido los motivos que han conducido a Ganomagoga a esta situación tan delicada. Otras empresas del sector consideran que el alza de los precios de las materias primas y la electricidad han sido la «gripe» definitiva para una empresa con una plantilla de 200 trabajadores. «Los márgenes de beneficio que tenemos en la industria del metal hoy en día son de entre el 10 y el 15 %», indica una fuente del sector. En todo caso, apunta que es el cliente el que aporta el material para la fabricación, por ejemplo de torres eólicas, mientras firmas como Ganomagoga ofrecen la mano de obra y el know how en la fabricación. «En cuanto sufrimos un retraso en el pago de un cliente o se complica un pedido, se viene todo abajo», añade. En los tres últimos años, además, la metalúrgica de Ponteareas habría hecho dos inversiones clave: una de ellas en la ampliación de la fábrica de Areas y otra en la compra de la planta de Wartsila, ahora Cedval.