«En mi juzgado tengo 300 demandas sin tramitar y 250.000 euros para entregar»

e. v. pita VIGO / LA VOZ

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E. V. Pita

Los letrados judiciales de Vigo empiezan a desatascar hoy los tribunales tras dos meses de huelga

29 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

«Tenemos ganas de trabajar, el daño que se ha hecho es mucho, es un final agridulce». Así hablaba un letrado judicial de Vigo tras votar para poner fin a la huelga que paralizó la Cidade da Xustiza durante dos meses y volver a sus despachos. Los 39 letrados de Administración de Justicia de Vigo regresan hoy a sus oficinas tras desconvocar ayer la huelga y cerrar un acuerdo con el Ministerio de Justicia para percibir un complemento de eficiencia de 430 euros brutos al mes, formación e incentivos. «No nos escuchaban», relata un huelguista.

Ahora, los antiguos secretarios judiciales se pondrán manos a la obra para despejar el atasco generado en Vigo, con casi 1.500 juicios suspendidos y el trabajo que se tramita en dos meses paralizado: cerca de 8.500 demandas y denuncias pendientes. Solo en los tribunales de Primera Instancia dormitan en los cajones más de 3.000 demandas de media atascadas por el parón de la huelga iniciada en febrero.

Un letrado de Vigo reconocía tras finalizar la huelga que en su despacho le aguarda una montaña de trabajo atrasado: «En mi juzgado tengo 300 demandas sin admitir a trámite y 250.000 euros en depósitos judiciales para entregar a los ciudadanos, llevamos dos meses sin hacer movimientos». Eso solo es la punta del iceberg porque los letrados, además de tramitar demandas y autorizar pagos a los demandantes que ganaron los juicios, tienen otras funciones como organizar las tomas de declaraciones, que también se paralizaron. Aunque no todos los letrados hicieron huelga, hubo gran apoyo.

«Nos sentimos responsables de nuestras oficinas y del atasco. Llegado el momento, se negociará un plan para recuperar el trabajo», dijo el portavoz nacional y letrado del Juzgado de lo Penal número 1 de Vigo, Juan José Yáñez. «Fueron unos momentos muy intensos de mi vida, quiero volver a la normalidad y ser otra vez un funcionario gris», indicó el lunes, a la salida de una votación.

Una de las soluciones para aliviar el atasco que se baraja es que los letrados y el Ministerio de Justicia negocien un programa de horas extra para sacar adelante por las tardes todo el trabajo atrasado, como hicieron los funcionarios judiciales gallegos en el 2018 tras un parón de tres meses.

Hay mucho atasco en lo civil, en un penal que dejó de celebrar en torno a 75 juicios, o en la quinta sección de la Audiencia de Pontevedra, que suspendió en torno a quince vistas aunque celebró una por jurado porque el acusado estaba en prisión.

«Teníamos muchas ganas de acabar, esta tarde nos lanzaremos a trabajar, no es el resultado deseado pero nos conformamos», dice un letrado. «La situación era insostenible», añade una compañera. En la asamblea celebrada el lunes en Vigo «triunfó el sí», con 24 votos a favor, tres en contra y una abstención. Para los letrados de las comarcas, la subida salarial no les arreglará la vida: «No fue justo. En pueblos grandes como Redondela, Ponteareas, O Porriño o Tui trabajamos más que en una ciudad como Vigo y cobramos menos. Tienes guardias localizadas y no libras. Gastas en desplazamientos y estás mal pagado», dijo una letrada.

Tras la victoria de los letrados, el sindicato de funcionarios judiciales Staj reclamó ayer una subida salarial al ministerio.