El Hospital Povisa vuelve a cambiar de gerente con su futuro sin despejar

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO

Las personas que han ejercido la gerencia de Povisa desde la llegada del grupo Ribera: Ángela Guerra, José David Zafrilla (en dos períodos), Rafael Cabadas y María Luisa Brandt
Las personas que han ejercido la gerencia de Povisa desde la llegada del grupo Ribera: Ángela Guerra, José David Zafrilla (en dos períodos), Rafael Cabadas y María Luisa Brandt LA VOZ

Ángela Guerra será la quinta dirigente desde la llegada del grupo Ribera

21 sep 2023 . Actualizado a las 22:55 h.

El Hospital Povisa planea un nuevo cambio en la gerencia, el segundo de este año en el centro del grupo sanitario Ribera. Según confirman varias fuentes del hospital y otras del sector sanitario, la médica Ángela Guerra se hará cargo de la dirección del centro sanitario vigués. De acuerdo con esas fuentes, el relevo es inminente y previsiblemente se haga coincidir con el inicio de octubre. Una portavoz de la dirección de Povisa, preguntada ayer por un inmediato cambio en la dirección, dijo que no hay «nada confirmado de momento».

Ángela Guerra es una médica de familia que llevaba menos de cuatro años como gerente del hospital que el Grupo Vithas —dueño en Vigo del antiguo Nuestra Señora de Fátima— tiene en Vitoria, de 48 camas. Antes dirigió otros hospitales, todos ellos en la sanidad privada: el Felipe II de Valladolid (Grupo Recoletas, 75 camas), centros sociosanitarios de las Hermanas Hospitalarias en Castilla y León, y la aseguradora Sanitas en esa región. Pasará a hacerse cargo del mayor hospital privado de Galicia y uno de los mayores de España, que según los datos oficiales tiene 543 camas. Y, sobre todo, el único de Galicia que tiene un concierto con el Servizo Galego de Saúde para atender a una parte de la población adscrita a la sanidad pública, que en este momento ronda las 125.000 personas.

Ribera desembarcó en Povisa en diciembre del 2019, cuando finalizó la compra del hospital a Nosa Terra, de la familia Silveira. Pocos meses después comenzó la pandemia. En estos menos de cuatro años ha tenido ya cinco gerentes: María Luisa Brandt, que venía del equipo anterior permaneció casi otro año más; José David Zafrilla, que la sustituyó de forma temporal durante nueve meses; Rafael Cabadas, que estuvo en el cargo casi dos años; otra vez Zafrilla (seis meses); y ahora Ángela Guerra.

Toda esta serie de relevos se produce en un momento delicado, en el que el hospital se juega su futuro. Povisa es la segunda empresa de Vigo con más plantilla y el 72 % de sus ingresos provienen del Sergas, gracias al concierto que lo convierte en el hospital público para una parte de la población. Ese contrato permite que el Sergas transfiera a Povisa una cantidad anual por cada persona que tiene asignada, independientemente de cuánto vaya al médico. Pero caducó hace un año y acaba de ser prorrogado por segunda vez. En agosto del año próximo ya no habrá más posibilidades de prórroga y el nuevo concierto está sin negociar. Queda menos de un año y no está claro qué modelo quieren ni el Sergas ni el grupo Ribera para esa relación, si será parecido al actual o se buscará algún cambio.

Lo que sí está claro, porque así lo reflejan las cuentas anuales de la compañía, es que el modelo actual ha traído pérdidas al hospital todos y cada uno de los años que ha estado vigente, desde finales del 2014. La empresa acumula más de 30 millones de euros de pérdidas netas, así que parece claro que va a pedir un cambio.

Las negociaciones entre el Sergas y Povisa para un concierto nuevo empezaron gestionándose desde Vigo, hasta que la dirección del grupo en Valencia decidió asumirlas. Pocos meses después presentaron su renuncia el entonces gerente, Rafael Cabadas, y la directora financiera, Luisa Sánchez.

La solución del grupo Ribera fue volver a poner a Zafrilla al frente del hospital. Pero este enfermero es también el director de operaciones del grupo, de modo que tiene que controlar todos los hospitales. La situación de estos meses era anómala, según reconocen mandos del hospital, por esa duplicidad de cargos.

Entre los jefes de servicio del hospital es conocido el inminente relevo en la dirección y se espera ya una etapa de estabilidad. El contexto no ayuda. El futuro del concierto lo marca todo. Además, en los últimos meses llegó a estar convocada una huelga porque el grupo no quería actualizar los salarios de la plantilla, que llevaban congelados desde el 2010, y se deseconvocó in extremis.