Cinco horas contando bajo una parra 1,5 millones euros de la cocaína en billetes de 10, 20 y 50 en Ribadumia

VIGO

Uno de los detenidos por la Policía Nacional pasando a disposición judicial en A Coruña este sábado
Uno de los detenidos por la Policía Nacional pasando a disposición judicial en A Coruña este sábado CESAR QUIAN

El considerado cabecilla de la última trama desmantelada en O Salnés, Ismael Cores, su pareja y un colaborador ingresaron en la cárcel de Teixeiro acusados de tráfico de drogas y blanqueo de capitales; la Fiscalía no pidió prisión para el también investigado Juan Carlos Santórum

29 nov 2023 . Actualizado a las 12:03 h.

Para los investigadores, Ismael Cores Barreiro figura en lo más alto de la última trama de narcotráfico desmantelada en las Rías Baixas. Él mismo se puso en el punto de mira policial al hablar a calzón quitado dentro de su Audi con su pareja sentimental. Conversaciones sin filtro que figuran en el procedimiento instruido en el Juzgado número 1 de A Coruña. Cores hablaba de euros y kilos de cocaína como de patatas.

En lo referido al dinero, los registros practicados esta semana evidencian que no iba corto de fondos. Además de su casa, se inspeccionó la de sus padres, en Ribadumia. Los agentes, con Cores presente, accedieron de madrugada. Primero recorrieron el inmueble, sin éxito. Pero el olfato de perro policía los llevó a la viña trasera.

CESAR QUIAN

CESAR QUIAN

La madre de Cores incluso recomendó no acceder al considerarlo innecesario. Pero el perro insistía. Su olfato no erró. Allí, bajo la parra, encontraron una maleta de viaje de color rosa. Dentro, paquetes forrados con cinta aislante con 1,5 millones de euros en billetes de 10, 20 y 50. El recuento del botín se prolongó cinco horas, hasta el amenecer. A mayores, se decomisaron más de 60 kilos de cocaína: 50 a bordo de una furgoneta que Cores y un presunto compinche, Ricardo Cacabelos Charlín —excolaborador del histórico narco fallecido Patoco— habrían cargado en una furgoneta Citroën Jumpy para que María Teresa Prieto llevase hasta Gijón. La droga fue requisada antes de entregarse a sus destinatarios, ya en Asturias. A mayores, en Gijón, en un trastero, la Policía Nacional encontró más kilos de cocaína y cinco de hachís. Prieto ingresó el viernes en prisión.

También se decomisaron 50.000 euros en una casa en León propiedad de la pareja de Cores, el principal investigado. Y 300.000 euros en una empresa especializada en la instalación de invernaderos, propiedad de José Meaño —primo de Cores e implicado en el 2017 en otra operación de narcotráfico con 2,4 toneladas de cocaína incautadas—. Dicha empresa se ubica frente a la casa de los padres de Cores, donde se encontró el millón y medio de euros. En otro registro se halló una colección de relojes Rolex.

Pase a disposición judicial

Pero más allá de la parte cuantitativa de la operativa policial realizada esta semana, ayer, en el juzgado instructor en A Coruña, se dirimió la carga penal real contra los implicados. De los once detenidos, pasaron a disposición judicial seis, de los que tres ingresaron en prisión provisional comunicada y sin fianza en el centro de Teixeiro: Ismael Cores Barreiro, como presunto cabecilla de la trama; su pareja y presunta colaboradora, Elena María Bravo; y el también considerado estrecho colaborador de Cores, Ricardo Cacabelos Charlín. Otros dos investigados tendrán que comparecer quincenales en sede judicial. Uno, empresario residente en Vilagarcía, carece de antecedentes, y el otro es Juan Carlos Santórum. El fiscal no solicitó prisión provisional para ninguno de ellos.

Está por ver cómo avanzará la instrucción judicial. La prueba acusatoria contra Cores y su círculo más próximo parece consistente en forma de dinero y droga confiscada. Ya contra el resto de implicados, sobre todo Santórum y el empresario de Vilagarcía, se sustentaría en las conversaciones grabadas a Cores sin que él supiera que se recogía lo dicho. Cores —interpreta la investigación policial— los relaciona con el negocio de la cocaína, asumiendo el propio Cores el papel de distribuidor y ellos de destinatarios. Un cambio de papeles importante, porque hasta hace dos años, sería Santórum el que estaría por encima de Cores.

Santórum, libre con tres causas abiertas contra él

Juan Carlos Santórum, representado desde hace años por la abogada Carmen Ventoso, sigue eludiendo la cárcel. Ayer evitó ingresar en prisión otra vez, igual que el mes pasado cuando lo relacionaron con el decomiso de cuatro kilos en Milladoiro. A mayores, tiene pendiente un juicio por 3.824 kilos decomisados en el 2020. La Fiscalía le pide 18 años de cárcel, y la vista tendría que celebrarse este año.