El dueño del chihuahua abandonado en un contenedor de Vigo para no pagar el veterinario afronta hasta 50.000 euros de multa
VIGO
El delito de maltrato animal propuesto por la Policía Local puede conllevar una pena de18 meses de cárcel
21 feb 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El propietario del chihuahua abandonado en un contenedor de Vigo para no afrontar una factura de 700 euros del veterinario se enfrenta a una multa de hasta 50.000 euros por este hecho, que además implico un delito penal e ir a juicio. La Policía Local de Vigo considera lo ocurrido, y así lo plasma en el atestado enviado al juzgado, un delito de maltrato animal. La tipificación, tras la última reforma del Código Penal, conlleva diferentes consideraciones en función de los hechos que se instruyan. Pero este caso de abandono, de considerarse grave, implicaría una multa de 50.000 euros como máximo.
Todo empezó a finales de enero cuando la víctima de un robo estaba buscando su riñonera en un contenedor de basura de la avenida de la Florida. Al mirar, se asustó porque una bolsa del colector se movía. La abrió y, dentro de un segundo envoltorio atado, vio asomar la cabeza de un perro de pequeñas dimensiones que se quejaba. Tenía varias heridas. El joven trasladó urgentemente al animal a un centro veterinario de guardia en la calle Teixugueiras, en Navia, y fue asistido por la veterinaria del centro quien reconoció de inmediato al animal porque lo había atendido horas antes. Tenía heridas graves que necesitaban de la rápida intervención quirúrgica para salvaguardar la vida del perro. Algunas lesiones estaban en una de las patas delanteras.
Umir
La Unidad Medioambiental de Intervención Rural (Umir) de la Policía Local de Vigo, especialistas en medio ambiente e intervenciones con animales, investigaron los hechos. Finalmente, dieron con el dueño, que al verse descubierto confesó que tenía otro perro de raza Akita Americano, grande y con mandíbulas fuertes y poderosas, que había herido gravemente a su chihuahua, con el que convivía.
Fue ahí cuando admitió que las lesiones causadas implicaban una intervención quirúrgica, que le supondría un gasto económico de unos 700 euros, y decidió abandonar el centro, alegando que se lo llevaría a un amigo también veterinario, para su tratamiento. Lo que no hizo, sino que lanzó al animal herido a un contenedor sin imaginar que el acto se volvería en su contra y le conllevaría la presunta comisión de un delito penal que además de multa, podría implicar una condena de hasta 18 meses de cárcel sin el juzgado lo considera.