
El curso bajo del río es la zona con más compensaciones de toda Galicia
06 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.En la Nochebuena del 2022 el río Lagares se desbordó, como tantas otras veces, a la altura de Balaídos anegando el párking del estadio. Fue la inundación más grande de los últimos años y los bomberos tuvieron que rescatar a una persona mayor que quedó atrapada en su coche cuando el agua le llegaba a la altura de las ventanillas. El río también entró en el estadio e inundó los bajos del edificio unos días antes de que el Celta se enfrentara al Sevilla en la jornada liga. Los empleados del club tuvieron que trabajar a marchas forzadas para que el recinto pudiera dar un mínimo de servicios en el partido tras el paso de la riada, que afectó al mobiliario de los vestuarios (se tuvo que renovar) y hasta el sistema de retransmisiones de televisión.
Las continuas subidas del río hacen que las indemnizaciones que abona el Consorcio de Compensación de Seguros (CCS), organismo que depende del Ministerio de Economía y que cubre a las aseguradoras cuando se producen situaciones extraordinarias como inundaciones, escalen a algo más de seis millones y medio de euros entre el 2018 y el 2023, tal y como recoge la última memoria de evaluación de riesgo de inundación en la demarcación de Galicia-Costa del ciclo 2028-2033, publicada por Augas de Galicia.
Más de la mitad de estos gastos en indemnizaciones corresponden al código postal 36213, que coincide con el curso del río Lagares a su paso por Castrelos y San Andrés de Comesaña. El Consorcio tuvo que abonar 3,3 millones de euros entre el 2018 y el 2023, lo que supone un gasto de unos 665.000 euros al año. Además, en el código postal 36210, que se corresponde con la avenida do Fragoso, las calles Moreiras y Val Miñor y la avenida de Balaídos, el gasto en indemnizaciones fue de 1,1 millones de euros, más de 200.000 al año. La suma de ambas zonas es de casi 4,5 millones, lo que supone un 69 % del gasto total en indemnizaciones en toda la ciudad. Parte de estas compensaciones se destinaron a empresas, ya que el río atraviesa, además de Balaídos, el polígono de O Caramuxo.
Estas cifras se corresponden con un problema del que aún se espera una solución. La ciudad creció hacía el lecho de un río que en su curso medio y bajo modeló una planicie de inundación, zona que se anega en caso de lluvias torrenciales y que actúa como reservorio de agua. De hecho, el nuevo Plan Xeral de Vigo indica que en la ciudad «existen zonas inundables de orixe fluvial asociadas ao curso do río Lagares dende o treito alto ata a súa desembocadura (16,27 kilómetros), e no río da Barxa ao seu paso por Sárdoma (1,34 kilómetros)», justo en esta zona, la Xunta anunció que creará una parcela de inundación controlada con una superficie de 73.000 metros cuadrados que, en caso de crecidas, puede llegar a albergar un volumen estimado de 110.000 metros cúbicos de agua que se devolverán gradualmente al Lagares. «Con estas actuaciones se reconstruye el ecosistema que en su día destrozamos. Mejor tarde que nunca. Ese es el camino», destaca el educador ambiental de Amigos da Terra, Antón Lois.
Las otras zonas más afectadas por inundaciones en Vigo, según la memoria de Augas de Galicia, son el centro de la ciudad, en el que Consorcio de Compensación de Seguros abonó más de 452.000 euros en indemnizaciones entre el 2018 y el 2023, Alcabre, Bouzas y Coia (código postal 36209), en las que se pagaron 192.805 euros en compensaciones, y San Miguel de Oia y Canido, con 193.055 euros en ayudas. El quinto lugar lo ocupa el código postal 36214 (Bembrive, Cabral, Lavadores, Sárdoma y Vilar) con más de 175.000 euros.
Esta situación también ha provocado que el nuevo Plan Especial de Protección Civil ante o Risco de Inundación en Galicia (Inungal) inste a Vigo a elaborar un plan municipal contra inundaciones que contemple un análisis de riegos, recursos y actuaciones posibles en el territorio y, que según la Xunta, aún no tiene.
Además, el informe autonómico también avisa de que la situación puede ir a peor en los próximos años si no se actúa para mitigar riesgos: «Na fachada costeira, entre as provincias de Pontevedra e Guipúscoa, a 2040 a proxección tendencial da inundación implicaría uns custos entre o 0,4 e 1,5 % do PIB anual provincial de 2008», indica la memoria
300.000 euros para el saneamiento de la zona de Balaídos
El alcalde de Vigo, Abel Caballero, anunció en agosto del año pasado que la Xunta de Goberno aprobó el proyecto para la mejora del saneamiento de la zona de Balaídos con el «obxectivo de reconducir a auga da choiva para evitar a súa acumulación e mellorar as condicións de inundabilidade da zona». El Concello actuó en las conducciones del entorno de la glorieta donde confluyen importantes infraestructuras de saneamiento como colectores de margen en la avenida Balaídos, Manuel de Castro y en la avenida do Fragoso para reconducir el agua de lluvia hacia los tanques de tormentas que hay en Balaídos, lo que permite mejorar las condiciones de inundabilidad en el área.