«Ganar en Valencia es lo único que está en nuestra mano», comenta Cristina Cantero sobre la jornada final
15 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.El Celta de la Liga Femenina de baloncesto comenzó la cuenta atrás para la jornada definitiva y el primer mensaje de Cristina Cantero es pensar en ganar en Valencia, aunque parezca un imposible para no dejar la tarea de la salvación en manos de los rivales, que tienen partidos mucho más asequibles. La jornada tendrá horario unificado: sábado a las 19 horas.
«Ganar en Valencia es lo único que está en nuestra mano, el cómo juguemos y cómo afrontemos el partido. Es verdad que Valencia es un plantillón y que son mejores como jugadoras, pero hay que ponerse y hay que jugarlo. Vamos a pensar en cómo podemos competir y qué podemos hacer para hacerle daño, además de recuperar a las jugadoras», comentó la entrenadora después de superar al Ardoi y salir de los puestos de descenso.
En la Fonteta, para el Valencia, es un partido de tránsito. Segundo clasificado, tiene asegurado el factor cancha en el primer play off, pero quizás quieran resarcirse de la doble derrota en la Final Four de la Euroliga. Si el Celta gana, tendría una tercera temporada en la élite; de lo contrario, debe que sacar la calculadora. En caso de derrota, la mejor opción para las de Cristina Cantero es que perdieran los tres y de hacerlo uno, que sea el Araski. En ambos casos se salvaría.
El Araski, con todo a favor
El gran problema para el Celta es que el equipo de Vitoria, al que el Celta gana el básketaveraje particular, lo tiene todo a favor. Juega en casa, ante un rival que no se juega nada, con Seehia Ridard, una de sus jugadoras de referencia, recién operada y por lo tanto baja, y con el descarte de Bella Murekatete, que ya rescindió su contrato.
De ganar el Araski y perder el Celta, el equipo vigués estaría virtualmente sentenciado con independencia del resultado del IDK en Lugo porque las donostiarras aventajan en 65 puntos a las viguesas en el coeficiente general ya que el particular, sorprendentemente está empatado. Las donostiarras son las únicas que no tienen garantizada la salvación en caso de triunfo, porque en un triple empate bajarían.