Las multas de tráfico en Vigo duplican la recaudación prevista

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO

XOÁN CARLOS GIL

Las sanciones de todo el 2024 en la ciudad suman 7,5 millones de euros

20 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

El Concello de Vigo ha vuelto ha terminar el año imponiendo muchas más multas de tráfico de las que preveía inicialmente. El presupuesto que aprobó para el 2024 reflejaba que recaudaría cuatro millones de euros a través de las sanciones de la Policía Local. La realidad, según los datos oficiales de la liquidación de ese presupuesto, es que las multas de tráfico suman un valor de 7,48 millones. Prácticamente el doble.

Los datos prácticamente calcan los de los dos años anteriores. Tanto en el 2022 como en el 2023, el Ayuntamiento dejó constar en su presupuesto que el valor de las multas de tráfico sería de 4 millones a lo largo de los doce meses. En el primero de esos dos ejercicios las sanciones sumaban un total de 7,76 millones; en el segundo, 7,49 millones.

Es una tendencia que se repite en Vigo desde hace al menos 17 años. El recuento de estos datos que hace La Voz indica que cada uno de los últimos 17 años el Concello de Vigo siempre ha recaudado mucho más de lo que marcaban los presupuestos. En casi todos esos años, como se puede comprobar en el gráfico, la cantidad generada duplicaba la previsión inicial. Un año incluso la cuadriplicó.

Las dos únicas excepciones han sido los años 2015 y 2020. En el 2015, la recaudación fue de 5,92 millones. En mayo de ese año se celebraron las elecciones municipales. El PSOE de Abel Caballero llegaba a la cita con las urnas gobernando la ciudad en minoría, con once concejales sobre 27. Tras los comicios, Caballero devoró al PP, que pasó de 13 a 7, el BNG desapareció de la corporación e irrumpió Marea. Los socialistas lograron su primera mayoría absoluta, que entonces parecía amplísima, con 17 ediles —ahora tienen 19—. Ese año de elecciones, la recaudación en multas fue la más baja de toda la serie.

En el 2020 se desató la pandemia de covid-19. En la noche del 14 de marzo, el Gobierno central dictó el confinamiento domiciliario, que obligaba a todos los ciudadanos a permanecer en sus casas para frenar la expansión del coronavirus. Solo se podía salir del hogar bajo determinadas excepciones, lo cual redujo mucho la movilidad durante tres meses, porque hasta mediados de junio no volvió la libre circulación. Durante este tiempo, la imposición de multas por aparcar mal o por superar los límites de velocidad tuvo que desplomarse. A finales de año, Galicia entró en un régimen de semiconfinamiento dictado por la Xunta, con los locales de hostelería cerrados, ante un rebrote en la epidemia. Aun así, la recaudación en multas llegó a 6,49 millones de euros.

El desfase entre la cantidad que presupuesta y la que finalmente recauda es habitual, pero nunca ha merecido un reproche por parte de los funcionarios que controlan la ejecución del presupuesto del Concello de Vigo. Hay años en los que el gobierno local ha hecho modificaciones del presupuesto a mitad del ejercicio y se ha aumentado la partida inicialmente prevista. Otros años, el gobierno local no lo ha considerado necesario. Ni la Intervención ni la Tesorería del Ayuntamiento han dejado constancia de objeciones en los informes que hacen sobre la ejecución del presupuesto local.

Desde el 2008, los presupuestos han reflejado unos ingresos previstos de 74 millones. La realidad los ha elevado a 142.

En el presupuesto del año 2025, el Ayuntamiento ha vuelto a consignar la misma cantidad de ingresos por las multas: cuatro millones de euros.

El Concello también ingresó 1,3 millones en sanciones de años anteriores

La recaudación de las multas de tráfico tiene su complejidad. Las sanciones se imponen todos los días del año, pero no se pagan siempre. Hay ciudadanos que recurren las multas y, mientras tanto no las abonan, hay otros que tardan en depositar el dinero, otros se declaran insolventes... La casuística es amplia. Así que el Concello genera unos ingresos teóricos por las multas que ponen sus policías, pero no todos esto ingresos se transforman en dinero que llega a la cuenta bancaria del Ayuntamiento.

De los 7,5 millones en multas que los policías impusieron a lo largo del 2024, cinco millones sí se pagaron. Los otros 2,5 estaban pendientes el 31 de diciembre. A lo largo del año, además, ciudadanos que debían 109.000 euros en multas se declararon insolventes.

Pero así como el Concello no ingresó en el 2024 todo el dinero que impuso en multas en ese año, sí recibió pagos de ejercicios pasados, por sanciones que estaban recurridas, por otras que se impusieron a finales de año y no dio tiempo a pagar, etc. En el 2024, además de los cinco millones que ingresó, cobró otros 1,3 millones en multas que se habían impuesto en años anteriores.

Hay que tener en cuenta que el dinero que llega con retraso muchas veces viene acompañado de intereses de demora. El Ayuntamiento tiene contratada una empresa que ejerce como cobrador de morosos, a cambio de comisiones sobre lo percibido.

También hay ciudadanos que arrastran deudas con el Concello por multas de ejercicios anteriores al 2024 y se declaran insolventes. Esto ocurrió con 416.000 euros de deudores del Ayuntamiento.